MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
Alrededor del 50 por ciento de los pacientes españoles con Alzheimer ha sufrido el uso de sujeciones físicas, a pesar de que la medida haya quedado obsoleta debido a que está probado que las sujeciones no se necesitan para ofrecer cuidados con una seguridad aceptable.
De hecho, todavía se usan en el 75 por ciento de los casos para prevenir caídas, por motivos de conveniencia de la organización, y no para fines terapéuticos, sino en beneficio de la organización y no de la propia persona.
Por este motivo, la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (CEAFA) y Fundación Maria Wolff han creado la 'Acreditación en el Cuidado de Demencias sin Sujeciones', que tiene como objetivo ayudar a las residencias a adoptar un modelo de intervención que les permita ofrecer una atención y cuidados específicos a la demencia, centrado en la dignidad de las personas y huya del empleo de cualquier tipo de sujeciones.
La iniciativa pretende dar aliento, ayuda y reconocimiento a aquellas instituciones comprometidas con la mejora de la calidad asistencial a personas con demencia. En este sentido, responsables de ambas organizaciones han asegurado que una correcta atención puede favorecer la eliminación de las sujeciones y a la vez mantener, o incluso mejorar la seguridad global de los centros.
Para lograr obtener esta acreditación, los centros deberán implantar estrategias sistémicas de apoyo y formación de todo el personal de los centros, fundamentalmente, en el campo de las demencias, prevención de caídas, evitación de sujeciones químicas, manejo de problemas afectivos y conductuales mediante terapias no farmacológicas seleccionadas por expertos, y por programas que implanten una cultura amigable con las personas con demencias.
CONSULTORÍA Y FORMACIÓN
Y es que, experiencias en otros países han demostrado que el cambio del paradigma asistencial se puede conseguir mediante consultoría y formación. Se da la circunstancia que en Estados Unidos, como también ocurría en España, rondaba el 40 por ciento de prevalencia de sujeciones en residencias en los años 80. Además, diversos estudios han mostrado que se mejora la autonomía y dignidad de estas personas cuando se llevan a cabo metodologías adecuadas.
"Existe una necesidad para que se trabaje por un cambio cultural en la atención a las personas, atendiendo a sus necesidades y ofreciendo las atenciones necesarias que permitan hacerlo eliminando cualquier tipo de sujeciones", ha comentado el presidente de la Federación Aragonesa de Alzheimer, Francisco Javier Lasierra Pérez.
Por su parte, el presidente de la Fundación María Wolff, Rubén Muñiz, ha asegurado que con esta iniciativa de cuidados a la demencia libre de sujeciones, los residentes están "más tranquilos" y la conflictividad de las familias se reduce de forma "notable" ya que "no aumentan" las lesiones graves por caída.
"Cuando los familiares llevamos a nuestros enfermos a una residencia es porque el avance de su deterioro imposibilita ofrecerles un cuidado de calidad en el domicilio. Pero, siguen siendo personas, a las que seguimos queriendo, y hay que tratarlas como tales, respetando sus derechos y su dignidad", ha zanjado el presidente de CEAFA, Koldo Aulestia.