MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Organización Médica Colegial (OMC) ha exigido al Gobierno en funciones una inversión "extraordinaria y urgente" de 50 millones de euros que permita contratar unos 1.000 médicos de familia y pediatras para reducir la sobrecarga y la demora que sufren las consultas de estos profesionales en los centros de salud.
"La Atención Primaria está al límite de sus posibilidades y la Administración debe darse cuenta", según ha denunciado Vicente Matas, representante nacional de Atención Primaria Urbana de esta institución colegial durante la presentación de un estudio que muestra que el 50 por ciento de estos profesionales tienen un cupo de pacientes mayor del recomendado y no puede atender a sus pacientes en el mismo día o al día siguiente de pedir la cita.
Los representantes médicos reconocen que esta medida "sería solo un parche" ya que, a su juicio, el problema de la Atención Primaria es de infrafinanciación, ya que atiende el 85 por ciento de los problemas de salud con menos del 15 por ciento del presupuesto de la sanidad pública.
No obstante, pese a ello esta partida serviría para "relajar la demora asistencial y evitar el estrés que están sufriendo muchos médicos y pacientes", según ha destacado Matas, que también denuncia que esta sobrecarga también puede asociarse a un "mayor número de pruebas complementarias y prescripción de medicamentos por falta de exploración correcta".
Además, reconoce que elevan su petición al Gobierno "aunque esté en funciones" y no a las comunidades autónomas, que son las que tienen transferidas las competencias en sanidad, porque creen que "es necesario que el Gobierno resuelva la falta de equidad actual y el Ministerio de Sanidad vertebre el sistema".
CON MÁS PACIENTES ASIGNADOS DE LO RECOMENDADO
En la encuesta de la OMC participaron 3.167 médicos de Atención Primaria y 668 pediatras, algo más del 10 por ciento de los profesionales que tienen actualmente un cupo de pacientes asignado en la sanidad pública.
Aunque las recomendaciones establecen que cada médico de Atención Primaria no debe tener más de 1.500 pacientes asignados, y mil en el caso de los pediatras, la encuesta muestra como hasta el 52 por ciento de los médicos de familia y el 67 por ciento de los pediatras supera estas cifras.
Una situación que se agrava en periodos con un incremento de la demanda o en vacaciones y se eleva al 68 y 87 por ciento respectivamente en cada caso, según ha denunciado Matas.
Además, existen diferencias significativas entre comunidades autónomas y se observa como, en condiciones normales, en Baleares hasta el 83 por ciento de los médicos de Atención Primaria tiene un cupo excesivo de pacientes, seguida de Comunidad Valenciana (68%), Madrid (66%) o Andalucía (63%). En otras como Castilla y León o Galicia, en cambio, sólo el 23 y 28 por ciento respectivamente tiene un cupo excesivo de pacientes.
En el caso de los pediatras, la comunidad con más profesionales con un cupo excesivo es también Baleares (94%), seguida de Cataluña (92%), Cantabria (80%) y Andalucía (77%), mientras que en las comunidades de Aragón y Asturias es donde hay menos pediatras con este problema, un 33 por ciento en ambos casos.
SIN TIEMPO PARA VER A SUS PACIENTES
Este cupo excesivo conlleva un mayor número de consultas diarias, ha denunciado Matas, por encima de las 30 en Atención Primaria y las 20 en Pediatría recomendadas, lo que conlleva una "carga excesiva de trabajo" para estos profesionales que les impide dedicarle el tiempo que necesitan a cada paciente.
"Qué menos que 10 minutos", ha exclamado Jerónimo Fernández Torrente, vicesecretario de la OMC, que también denuncia la "excesiva carga burocrática" que tienen en sus consultas y que les ocupa "una cantidad de tiempo impresentable".
Así, la encuesta muestra como, de media, hasta un 41,3 por ciento de los médicos de Atención Primaria tiene más de 40 consultas diarias y hasta un 53 por ciento de los pediatras supera las 30 en situaciones normales.
En el caso de los médicos de familia, la saturación a las consultas es mayor en Andalucía, donde el 69 por ciento de los profesionales tiene más de 40 consultas diarias, seguida de Murcia (64%) y Castilla-La Mancha (60%), mientras que el problema es menor en País Vasco (5%), Aragón y Cataluña (6% en ambos casos).
Y en los pediatras, la sobrecarga de las consultas es mayor en La Rioja, con un 77 por ciento de profesionales con más de 30 consultas, seguida de Andalucía (76%) y Castilla-La Mancha; mientras que en otras como Navarra (23%), Aragón, Asturias y País Vasco (en las tres un 26%) supone un problema menor.
¿PARA CUÁNDO TE DAN CITA?
Del mismo modo, y aunque en Atención Primaria no hay lista de espera, el estudio muestra una demora a la hora de pedir cita en algo más del 50 por ciento de los casos, entendiendo como tal que un paciente no pueda ser atendido el mismo día en que lo pide o al día siguiente. En el caso de los pediatras, la demora es algo menor y sólo afecta al 30 por ciento de estos profesionales.
Además, el estudio muestra como hasta un 19 por ciento de los médicos de familia encuestados tarda entre 2 y 3 días en ver a sus pacientes desde que piden la cita, un 8 por ciento de entre 4 y 5 días y hasta un 3,8 por ciento reconoce una demora de más de una semana. En el caso de los pediatras, la demora máxima es de 2 a 3 días y afecta al 9 por ciento de encuestados.
"Esto conlleva un grave problema porque cuando se tarda en obtener una cita y el paciente cree que su problema es grave busca alternativas, y acude a los servicios de Urgencias de Atención Primaria o del hospital, que también se saturan y donde la atención tiene un coste mayor para el sistema", ha apuntado Matas.
Este experto reconoce que hasta el momento "el esfuerzo de los médicos ha servido para mitigar las consecuencias que conlleva este problema" pero admite que en muchos profesionales están sufriendo "infartos y otras enfermedades" como consecuencia de esa sobrecarga.
Además, el secretario general de la OMC, Juan Manuel Garrote, ha denunciado que pese a la inyección presupuestaria que reclaman el problema del sistema es "estructural" y por ello reclama una transformación de la Atención Primaria en España para que disponga de una financiación "finalista, suficiente y equitativa"..