MADRID, 24 May. (INFOSALUS) -
El alcohol es un producto con alta visibilidad en la población, relacionado con el ocio y las relaciones sociales, no genera demasiado coste económico y tiene un acceso es fácil, circunstancias que inducen a una cómoda adquisición y, por tanto, mayor consumo.
Además, recuerdan desde Proyecto Hombre, se trata de una sustancia asociada a la obtención de refuerzos sociales inmediatos, que representan estándares de éxito en nuestra sociedad, y lo que puede dar como resultado un consumo continuado y abusivo.
En este contexto, existe una delgada línea que separa, en ocasiones, el uso del abuso. Según el Informe 2013 del Observatorio Proyecto Hombre sobre el Perfil de las personas con problemas de Adicción en Tratamiento, se constata que el 56% de los jóvenes que acudieron a los Centros Proyecto Hombre tenían consumos problemáticos de alcohol.
Este Informe además pone de manifiesto que el alcohol continúa siendo la principal sustancia de consumo en España, además de ser la más barata y la de más fácil acceso; asimismo, se trata de una sustancia cuya baja percepción de riesgo que tiene la sociedad contribuye a seguir aumentando los niveles de consumo.
¿BEBES DEMASIADO ALCOHOL?
Desde Infosalus te proponemos responder a siete preguntas, que plantean desde Proyecto Hombre, y que pueden ayudarte a detectar un posible consumo problemático de alcohol:
1. ¿Has estado alguna vez bajo la influencia del alcohol en una situación que podría haber causado un accidente u otro daño?
2. ¿Has bebido más de lo que pretendías?
3. ¿Tu red social se ve alterada o condicionada por tu relación con el alcohol?
4. ¿Has usado el alcohol para tapar tu malestar o evadirte de tus problemas?
5. ¿Afecta el alcohol a tu situación laboral?
6. ¿Te causa molestias tu forma de beber?
7. ¿Afecta el alcohol a tus relaciones familiares?
Si tus contestaciones son mayoritariamente afirmativas, quizá ha llegado el momento de que pidas ayuda. Busca el apoyo de un amigo o amiga, o de la familia; asimismo, puedes buscar ayuda de un profesional con el que poder decir adiós a la tiranía de la dependencia.
EFECTOS DEL ABUSO DE ALCOHOL
Menos del 10 por ciento de los afectados por dependencia alcohólica reciben tratamiento en España, de ellos un 70% presentan reducción del número de días de consumo y una mejoría de la salud percibida a los 6 meses, aunque las recaídas son frecuentes.
El consumo de riesgo de alcohol y, por tanto, la dependencia alcohólica, se asocian al riesgo de desarrollar múltiples enfermedades, entre ellas hepáticas (cirrosis), cardiacas (miocardiopatía), mentales (depresión, demencia) o diversos cánceres (hígado, boca, esófago). Por otra parte, constituye un factor bien conocido determinante de violencia familiar y de género, accidentes laborales y de circulación.
Se considera consumo de bajo riesgo cuando no sobrepasa a la semana las 17 unidades en el caso de los hombres y las 11 unidades en el de las mujeres. Cuando se vuelve de riesgo es cuando se superan las 28 unidades en los varones y las 17 unidades en las mujeres a lo largo de la semana.