MADRID 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
La resistencia mecánica de los tumores y el daño colateral de los tratamientos estándar a menudo dificultan los esfuerzos para combatir el cáncer, pero un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS, por sus siglas en francés), del Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Científica (INSERM, por sus siglas en francés), de la Universidad París Descartes y de la Universidad París Diderot, en Francia, ha ablandado con éxito tumores malignos calentándolos.
Este método, llamado nanohipertermia, hace que los tumores sean más vulnerables a los agentes terapéuticos. En primer lugar, se inyectan nanotubos de carbono (CNT) directamente en los tumores y, entonces, la irradiación con láser activa los nanotubos, mientras que el tejido sano circundante permanece intacto, como se detalla en un artículo sobre el trabajo publicado en 'Theranostics'.
Los investigadores están centrado cada vez más su atención sobre los factores mecánicos que afectan el desarrollo del tumor. Los tumores se endurecen debido a la organización anormal de las fibras de colágeno y la matriz extracelular (ECM) que mantienen unidas las células del mismo tejido.
Además de ser un marcador de malignidad, este endurecimiento puede ayudar a las células cancerosas a proliferar y hacer metástasis. Además, la ECM forma una barrera física que limita penetrar en el tumor con agentes terapéuticos. Varios tratamientos intentan interrumpir la estructura de los tumores, pero son espadas de doble filo: como ECM es común a los tumores y los órganos sanos, degradarla hace tanto daño como bien.
Sin embargo, el equipo encontró una forma de evitar este problema en tumores de ratón. Después de ser inyectados directamente en los tumores, se activaron los CNT con luz infrarroja cercana. El láser sólo actúa sobre áreas de concentración de CNT, calentándolas.
Los investigadores controlaron la rigidez tumoral de forma no invasiva con elastografía por ultrasonido. En dos sesiones consecutivas con un día de intervalo, se expusieron los tumores a nanohipertermia o calentamiento localizado a 52 grados durante una duración de tres minutos.
Los tumores inicialmente se volvieron más rígidos antes de ablandarse gradualmente durante los diez días o más que siguieron el procedimiento. La nanohipertermia desnaturaliza localmente las fibras de colágeno y reduce la rigidez y el volumen de los tumores a largo plazo, además de interrumpir el microambiente tumoral y poder resultar eficaz como tratamiento adyuvante con quimioterapia.