MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Expertos de Atenzia han destacado la importancia de que, ante la llegada del verano y con motivo de que los abuelos suelen ser los "canguros" de los niños, se enseñe a los menores cómo pedir ayuda o el servicio de teleasistencia por si ocurre algo a los mayores.
Por ello, y porque es importante tener en cuenta los condicionantes físicos de los mayores provocados por la edad. Atenzia, ha puesto en marcha en Mallorca el taller 'Te ayudo, me ayudas, nos ayudamos', centrado en la prevención de accidentes para los 'Abuelos Canguro', para que tanto los mayores como los niños sepan reaccionar en casos de emergencia.
Además, recomienda que cuando un menor se extravía en la calle llamen inmediatamente a emergencias o activar el servicio de teleasistencia y, en el caso del menor, dirigirse a un adulto para pedir ayuda. Como medida preventiva los menores deben permanecer siempre dentro del campo de visión de los tutores, pactar un punto de encuentro, enseñar cómo y a quién pedir ayuda y escribir un número de contacto en el brazo.
VIGILAR A LOS MENORES
Asimismo, los expertos han subrayado la importancia de vigilar de forma constante a los menores, más aún en las piscinas, evitar poner a su alcance piezas pequeñas y juguetes no homologados, no dejar que coman o tomen el biberón solos, y, si tiene un objeto atascado en la garganta y en el caso en el que por sí solo no lo pueda expulsar, poner al menor cabeza abajo y dar golpes en medio de la espalda, apretar la boca del estómago.
"No dejar a los niños solos a cierta altura, sobre todo si son bebés, y extremar la seguridad de ventanas, escaleras y balcones. No dejar al menor bajo la vigilancia de un hermano mayor. Poner pegatinas en las cristaleras y colocar antideslizantes en la bañera y cuarto de baño. Prestar especial alerta con los objetos de los que pueden tirar y caer encima (planchas, manteles). En caso de golpe aparatoso, llamar inmediatamente al servicio de teleasistencia y de emergencia", han aseverado los especialistas.
Además, han recomendado prestar máxima alerta en las cocinas y mantener hacia el interior el mango de la sartén; no dejar a los menores solos y no bajar la guardia; esconder mecheros, cerillas, colillas, petardos, cohetes y evitar situaciones peligrosas; mantener fuera del alcance de los niños los productos de limpieza, pintura, antipolillas, insecticidas o alcohol; mantener siempre los productos en sus envases originales; y no tomar medicamentos delante de los menores ni tenerlos a su alcance.
"Los abuelos son uno de los pilares de las familia y desde Atenzia trabajamos en que siga así. Con iniciativas como ésta no sólo buscamos preservar la autonomía de los mayores sino que buscamos que se sientan más seguros y acompañados en cada momento", ha zanjado la directora de la Zona Balear de Atenzia, Silvia Fornés.