MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El gasto global de la demencia, enfermedad que afecta a 46,8 millones de personas en el mundo, se está incrementando progresivamente como consecuencia del envejecimiento de la población y se sitúa ya en unos 711.000 millones de euros (unos 818.000 millones de dólares), lo que hace que supere el valor de mercado de compañías como Apple o Google.
Así se desprende del último informe elaborado por la Federación Internacional del Alzheimer (ADI, en sus siglas en inglés) realizado con el apoyo de Bupa, que recuerda que las dos empresas tecnológicas tienen una capitalización de 742.000 millones de dólares (unos 644.000 millones de euros) y 368.000 millones (319.000 millones de euros) respectivamente.
Del mismo modo, apuntan que si la demencia fuese un país sería la décimoctava economía más grande del mundo y podría formar parte del grupo de países más industrializados, el llamado G20.
El informe también muestra como el coste económico y social de este conjunto de enfermedades mentales, entre las que se encuentra el Alzheimer, alcanzará el billón de dólares (870.000 millones de euros) en 2018 y para el año 2030 se duplicarán estas cifras, alcanzando los 2 billones de dólares (1,7 billones de euros).
Este incremento se producirá como consecuencia del aumento de casos también previsto. Así, en 2030 se alcanzarán los 74,7 millones de afectados y en el año 2050 casi se duplicarán los casos, con 131,5 millones de pacientes. De hecho, la incidencia de la enfermedad crece a un ritmo de 9,9 millones de nuevos casos al año, uno cada 3,2 segundos.
Además, el informe muestra un mayor incremento de la prevalencia y el gasto asociado en países de medianos y bajos ingresos, donde se estima ya que viven el 58 por ciento de los pacientes con demencia. Y en 2050, lo harán el 68 por ciento de los afectados, casi la mitad en el continente asiático.
EL GASTO DE ESTA ENFERMEDAD SE HA SUBESTIMADO
El profesor Martin Prince, del Observatorio Global sobre Envejecimiento y Demencia del King's College de Londres (Reino Unido) y autor de estas estimaciones, reconoce que hace años se subestimó el alcance que podía tener esta epidemia ya que el coste de la enfermedad está creciendo "más rápido que el número de personas afectadas".
Por ello, hacen un llamamiento a todos los grupos de interés para que se creen planes de trabajo específicos centrados en ayudar a los países con menos ingresos a desarrollar programas para concienciar y fomentar el diagnóstico precoz y el cuidado de estos pacientes.
De hecho, urge a los países que forman parte del G20 a que lideren esta iniciativa y aumenten sus inversiones en el cuidado, tratamiento y prevención de estos trastornos mentales.
"El incremento del coste global de la demencia supondrá una seria amenaza para los sistemas sociosanitarios de todo el mundo. Existe una necesidad urgente de que los gobiernos desarrollen leyes e implementen políticas para garantizar una mejor calidad de vida para aquellas personas que viven con demencia", ha reconocido Marc Wortmann, director ejecutivo de ADI.