MADRID, 1 Dic. (INFOSALUS) -
Constituyen una alternativa a la leche más fácil de digerir y con muchos nutrientes y en la actualidad existe una amplia gama de posibilidades de leches de cereales y semillas, además de la cada vez más popular tendencia que aboga por prepararlas en casa como un producto fresco y adaptado a los gustos y necesidades personales.
¿POR QUÉ BEBER LECHES VEGETALES?
Según explica a Infosalus Nuria Roura, 'coach' nutricional y autora de ‘DETOX SEN’ (Urano, 2015), las leches vegetales son una opción para quienes desean cambiar la leche de vaca en su dieta por otra bebida similar o para la preparación de batidos, cremas y otras recetas pero hay que tener en cuenta que no debe considerarse un sustituto del consumo de los cereales o semillas con las que están preparadas.
Aunque a inicios de este siglo ya existían en el mercado leches vegetales, Roura recuerda que no tenían el buen sabor de las actuales y que no había la variedad que existe hoy en día en los supermercados y tiendas especializadas.
HACE TRES AÑO SE PRODUJO EL 'BOOM' DE LAS BEBIDAS VEGETALES PARA SUSTITUIR A LA LECHE DE VACA
“Fue hace unos tres años cuando se produjo el ‘boom’ de las bebidas vegetales para sustituir la leche de vaca, ahora existen de todo tipo y en múltiples combinaciones y esta variedad va a ir en aumento”, señala la autora de esta guía para una alimentación más consciente basada en los alimentos naturales e integrales.
Cuando se trata de elegir una u otra bebida vegetal, Roura aconseja leer las etiquetas y evitar aquellas con azúcares añadidos y componentes poco conocidos como carragenatos, goma xantana o maltodextrinas. “Debería llevar sólo el cereal o semilla, agua y algo de sal y aunque la mayoría incluyen el aceite de girasol, si es posible mejor tomar las que no lo llevan”, apunta la especialista en Nutrición por el ‘Institute for Integrative Nutrition’ de Nueva York.
TIPOS DE LECHES VEGETALES
Roura nos comenta las características nutricionales más destacables que tienen algunas de las leches vegetales que existen en el mercado y los aspectos en los que pueden contribuir a nuestra salud y rendimiento:
* Leche de avena: es digestiva, además se puede comprar sin gluten, posee un sabor suave y es una buena alternativa al trigo. Muy nutritiva y con fibra soluble, relaja el sistema nervioso y proporciona vitaminas del grupo B.
* Leche de arroz: a los niños les gusta por su sabor dulce y ayuda a regular el tracto digestivo por lo que es buena para quienes tengan alteraciones digestivas y en los episodios de diarreas o vómitos.
* Leche de quinoa: es un pseudocereal que pueden tomar los celiacos y los niños. Tiene más proteínas que los cereales y ácidos grasos monoinsaturados, magnesio, potasio, vitamina E, esteroles vegetales que ayudan a regular el colesterol y fibra.
* Leche de soja: aunque es la leche vegetal más popular, lo cierto es que puede ser indigesta para algunas personas por lo que su uso está más indicado en preparaciones culinarias en las que resulta cocinada. Las variedades enriquecidas con calcio y la presencia de isoflavonas, componentes vegetales con estructura similar a los estrógenos, la han convertido en una bebida estrella entre las mujeres en la menopausia.
* Leche de frutos secos: como la de almendra o avellanas que ya se comercializa. Son muy beneficiosas para las mujeres embarazadas y para las que dan el pecho a sus hijos ya que ayudan en la producción de leche. Entre sus nutrientes destacables están el calcio y las proteínas. La leche de avellana contribuye a lubricar el sistema respiratorio y la de almendra ayuda a regular los niveles de azúcar y a bajar el colesterol. Aún no se comercializan las de anacardos o nueces de brasil pero pueden prepararse en casa y son ricas en selenio, un micronutriente esencial con una potente capacidad antioxidante.
* Leche de coco: suele aparecer mezclada con la de arroz. Aporta mucha fibra y ácidos grasos de cadena media. Está en estudio por su posible valor para la prevención y tratamiento de la obesidad.
* Leche de alpiste: puede contribuir en las dietas de pérdida de peso debido a su alta capacidad enzimática para reducir la grasa corporal y regular el colesterol, también destaca por sus beneficios antiinflamatorios y por contribuir en el mejor funcionamiento pancreático.
* Leche de sésamo: se trata de una semilla con altos contenidos en calcio, energética, rica en minerales y con capacidad para equilibrar el sistema nervioso y potenciar la memoria, ayuda también frente al insomnio y el estreñimiento.
* Leche de trigo sarraceno: se trata de un pseudocereal muy nutritivo y que calienta más que el arroz, por eso es muy consumido en países como Rusia. Posee vitaminas del grupo B, magnesio o triptófano entre otros nutrientes.