MADRID, 30 Mar. (INFOSALUS) -
Siglas de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, en España la principal causa de EPOC es la exposición al tabaco, sobre todo activa pero también pasiva, que obstruye los bronquios y provoca la pérdida de capacidad pulmonar.
SÍNTOMAS DE LA EPOC
Los síntomas más comunes de la EPOC son disnea (sensación de que no entra aire en los pulmones) más común cuando se realiza ejercicio, tos, la producción de mucosidad, sibilancias (pitos) y descompensaciones o exacerbaciones respiratorias.
Según explica a Infosalus el doctor Bernardino Alcázar, coordinador del área de EPOC de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), los pacientes contactan con su médico por la sensación de falta de aire y por las exacerbaciones ya que la tos puede considerarse un efecto natural del tabaquismo pero no supone una preocupación para los fumadores.
TABAQUISMO
El tabaco inflama las vías respiratorias por las sustancias que contiene pero además, el organismo trata de defenderse de tal agresión y desarrolla procesos de reparación constantes. Dado que el hábito del tabaquismo continúa en el tiempo, los bronquios se van cerrando y si la agresión que genera el tabaco alcanza la parte profunda del pulmón puede dar lugar a un enfisema que supone la destrucción del final de los alvéolos pulmonares.
"Con el abandono del tabaquismo se produce cierta recuperación ya que la inflamación de los bronquios disminuye y mejora la capacidad pulmonar pero el daño establecido como el enfisema no revierte", aclara Alcázar, especialista del Área de Neumología del Hospital de Alta Resolución de Loja en Granada.
El tabaco afecta además al desarrollo pulmonar que se desarrolla desde la infancia y hasta los 25 años. "Si los pulmones no se desarrollan bien, ya sea por alguna enfermedad respiratoria o por el tabaquismo, la persona es más vulnerable a los efectos del tabaco y aunque se deje de fumar, existe ya la posibilidad de padecer EPOC en el futuro", apunta el especialista.
En cuanto a las diferencias entre asma y EPOC, el doctor Alcázar explica que existen pacientes que tienen rasgos de ambas condiciones pero la diferencia más importante es que la inflamación ocasionada por el asma se recupera con tratamiento y los pacientes se estabilizan con el tiempo en el caso de la EPOC los daños son permanentes.
"La EPOC es en la actualidad la tercera causa de mortalidad en el mundo pero si se deja el tabaco, se toma el tratamiento y se hace ejercicio de forma regular mejora el pronóstico de la enfermedad. En los pasados 30 años ha disminuido la mortalidad entre estos pacientes debido a los avances médicos realizados en la enfermedad", señala Alcázar .
En la actualidad es aún mayor el número de varones que padecen la enfermedad ya que el tabaquismo era más frecuente en los hombres hace décadas. "Sin embargo pero ya se ven más casos entre fumadoras que se incorporaron al hábito en la década de los 70 y los 80 y se espera que el número de mujeres afectadas por EPOC aumente progresivamente", continúa el facultativo.
VÍCTIMAS DEL TABAQUISMO TAMBIÉN PASIVO
Entre el 10% y el 25% de quienes padecen EPOC nunca han fumado. El tabaquismo pasivo también es una fuente importante de EPOC en el caso de aquellas personas que han convivido con un fumador durante 30 o 40 años o los profesionales expuestos al humo de tabaco en entorno laboral como es el caso del gremio de hosteleros.
"En España existen 10 pacientes de EPOC por cada 100 habitantes mayores de 40 años, esto supone que existen más de 2 millones de personas con EPOC, un 75% de las cuales no están diagnosticadas y no reciben tratamiento a pesar de sufrir síntomas", señala el doctor Alcazar.
Entre el 25% y el 50% de los fumadores desarrollarán EPOC. "Si se sufren síntomas como dificultad respiratoria, ruido en el pecho o tos hay que acudir al médico de cabecera o al especialista que realizará una prueba sencilla denominada espirometría con capacidad para detectar la enfermedad y tras realizar el diagnóstico recibir tratamiento", concluye Alcázar.