MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por sus siglas en inglés) y su recién creado Comité sobre el Ictus dice que el Día Mundial del Ictus debe ser una llamada de atención para las personas de todo el mundo. Cada año, 6,5 millones de personas mueren a causa de accidentes cerebrovasculares y otros 10 millones quedan permanentemente discapacitados.
"La verdadera tragedia es que la mayoría de estos casos se pueden prevenir", afirma el presidente del Comité sobre el Ictus, el profesor Petr Widimsky. "La gente tiene que comprobar sus niveles de presión arterial y si son altos, conseguir bajarlos con la dieta y el ejercicio o medicamentos. Los médicos cuentan con una gran variedad de tratamientos seguros y eficaces. Pero todo comienza por conocer sus niveles".
Los estudios muestran que sólo el 50 por ciento de las personas comprueban su presión arterial cada año y sólo el 30 por ciento mantiene un nivel saludable de 140/90 mmHg o menos. La vicepresidenta de Asuntos Científicos de la Sociedad Europea de Cardiología, la profesora Lina Badimon, señala que el nuevo Comité del Ictus debe hacer una contribución significativa en la lucha contra esta enfermedad.
"Al trabajar junto con otros expertos --neurólogos, cirujanos vasculares, neurocirujanos, neuroradiólogos, epidemiólogos y otros-- el Comité sobre el Ictus de la ESC tiene por objeto mejorar la conciencia sobre el ictus y la prevención", afirma Badimon. "También está trabajando para optimizar las estrategias para el tratamiento agudo del ictus, mapear la situación actual en Europa y lanzar una iniciativa pan-europea en el ámbito del accidente cerebrovascular agudo", concluye.