MADRID 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un porcentaje relevante de la población pediátrica presenta síntomas prolongados después de la COVID-19, concretamente el 18,4% tenía síntomas que duraban de 4 a 12 semanas, y hubo un 14,6% (1 de cada 7 niños) que estuvo sintomático durante más de 12 semanas. Así lo demuestra un estudio multicéntrico coordinado por un equipo del área de Enfermedades Infecciosas del CIBER (CIBERINFEC), el grupo de Pediatría del Hospital La Paz y el Instituto de Investigación Hospital Universitario La Paz (IdiPAZ).
El estudio, que ha publicado la revista 'Acta Pediátrica', señala que entre los síntomas que se asociaron significativamente con el post-COVID estuvieron los dolores de cabeza recurrentes, la pérdida de olfato y gusto, el dolor muscular, el cansancio crónico, dificultades de concentración, insomnio, apatía o tristeza, ansiedad, palpitaciones y mareos. Además, un 5,9% de los casos manifestaron sufrir otros efectos como la pérdida de cabello, pérdida de memoria o lesiones en la piel.
Los síntomas posteriores a la COVID-19 que persistieron durante más de 12 semanas fueron más comunes en los niños mayores de 5 años, para aquellos menores que tuvieron que ser hospitalizados o ingresados en unidades de cuidados intensivos pediátricos, y para aquéllos con familiares que también presentaron síndrome post-COVID.
Este trabajo, que investigó por primera vez la incidencia del síndrome post-COVID en menores españoles, también muestra que los niños tienden a tener un curso relativamente leve y menos grave de COVID-19 que los adultos y es menos probable que requieran hospitalización. Sin embargo, un pequeño porcentaje experimenta síntomas graves durante la fase aguda, principalmente neumonía, pero también el síndrome inflamatorio multisistémico en niños, que conlleva en muchos casos el ingreso en la unidad de cuidados intensivos pediátricos.
Tras la infección aguda por SARS-CoV-2, los síntomas pueden prolongarse y, en este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha identificado como síndrome post-COVID a aquellos casos en los que los síntomas duraron más de 12 semanas y no se explicaron por un diagnóstico alternativo. "En niños no hay muchos datos sobre la prevalencia del síndrome post-COVID y sus características", señala Cristina Calvo, investigadora del CIBERINFEC, del Hospital Universitario La Paz e IdiPaz, y una de las coordinadoras de este trabajo.
SE ANALIZARON CASOS DE UN TOTAL DE 451 MENORES
El objetivo de esta investigación fue determinar la prevalencia de síntomas prolongados después de la COVID-19 aguda, a las 4-12 semanas y tras más de 12 semanas, en niños y niñas españoles con una infección confirmada por SARS-CoV-2, así como describir las características clínicas que presentaron e identificar posibles factores de riesgo en nuestra población.
Para ello, se analizaron casos de un total de 451 menores de 18 años diagnosticados con COVID-19 sintomático entre el 14 de marzo y el 31 de diciembre de 2020 que fueron atendidos en tres centros de Madrid: los hospitales universitarios La Paz, Niño Jesús y Severo Ochoa. De ellos, la mayoría (82,0%) presentaron infecciones leves que requirieron atención ambulatoria y el 5,1% ingresaron en la unidad de cuidados intensivos pediátricos.
El estudio también incluyó un grupo de control de 98 niños y niñas tratados por otras patologías. Los datos sobre la persistencia de la sintomatología se obtuvieron a través de entrevistas telefónicas, que incluyeron cuestionarios diseñados específicamente para este estudio.
"La gravedad de la enfermedad puede haber sido un factor de riesgo importante, y los factores genéticos también podrían jugar un papel en la persistencia de los síntomas tras la COVID-19", concluye Calvo.