BRUSELAS, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los Veintisiete han reclamado este lunes a la Comisión Europea que tome medidas para abordar el impacto de los contratos laborales precarios en la salud mental de los trabajadores de la Unión Europea, según señala el primer conjunto de conclusiones sobre la interconexión entre salud mental y empleo que ha aprobado el Consejo.
En 2022, el 27% de los trabajadores de la Unión Europea sufrían estrés, depresión y ansiedad, mientras que la exposición a ciertos factores de riesgo relacionados con estas alteraciones mentales ha aumentado aún más como resultado de la pandemia de Covid-19.
En este sentido, el Consejo ha pedido a Bruselas que reflexione sobre una política adecuada para abordar los riesgos psicosociales en el trabajo, a considerar el derecho a la desconexión como medida de prevención y a fomentar la coordinación de iniciativas nacionales sobre la gestión de riesgos psicosociales en el trabajo.
Además, los interlocutores sociales están llamados a proseguir el diálogo social para mejorar las condiciones de trabajo y crear conciencia sobre el bienestar psicológico.
Teniendo en cuenta el surgimiento y consolidación de nuevas formas de trabajo los Estados miembro se han emplazado a promover políticas de empleo para combatir la precariedad, fortalecer los sistemas públicos que salvaguarden la salud mental en el trabajo y promover la investigación sobre salud mental en el trabajo.
Asimismo, se han comprometido a apoyar la contratación o reintegración de trabajadores con problemas de salud mental y a apoyar a los autónomos y a las pymes en la prevención de riesgos psicosociales en el trabajo.