Pide que la futura ley sobre consumo de alcohol y menores potencie en mayor medida la vertiente educativa de la prevención
MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Económico y Social ha aprobado recientemente un dictamen sobre el anteproyecto de ley de prevención del consumo de alcohol y de sus efectos en las personas menores de edad, en el que aborda la "necesidad de incidir en los canales de comunicación más influyentes en menores de edad".
El órgano consultivo del Gobierno en materia socioeconómica y laboral entiende que, frente a los medios de publicidad más tradicionales, el anteproyecto "no profundiza lo suficiente en los canales de comunicación y publicidad que más influyen en las personas más jóvenes, como los generadores de contenido".
En este sentido, considera necesario "delimitar con mayor claridad sus actuaciones en el ámbito de la promoción de bebidas alcohólicas, previniendo escenarios de poca transparencia y de confusión entre contenido comercial y de opinión que puedan derivar en publicidad engañosa o encubierta, especialmente ante un público fácilmente influenciable y vulnerable, como las personas menores de edad".
Para el CES, es fundamental que la normativa "establezca pautas claras de transparencia para identificar la publicidad en los mensajes difundidos a través de plataformas y redes sociales".
En lo relativo a los principios y objetivos del anteproyecto, valora de manera positiva el objetivo de la prevención del consumo entre menores, pero al mismo tiempo se reconoce su complejidad, en un contexto caracterizado por la presencia cotidiana de las bebidas alcohólicas, que gozan de una imagen social favorable.
Por ello, el órgano considera que la prevención "debe enmarcarse en un escenario más amplio de cambio cultural en torno al consumo de alcohol, siendo fundamental superar el enfoque predominantemente punitivo para transitar hacia un modelo de prevención del consumo de alcohol más apoyado en la educación sanitaria como elemento primordial para la mejora de la salud individual y comunitaria".
Lo expresado sobre la concreción de los compromisos de las administraciones públicas, que debieran incorporar, entre otras, la realización por parte de las administraciones y organismos competentes de campañas eficaces de información y concienciación sobre los riesgos asociados al consumo de bebidas alcohólicas, dirigidas específicamente a las personas menores de edad.
En este sentido, el dictamen del CES apunta que la inclusión de una Memoria económica "hubiera podido facilitar una mayor información sobre las estimaciones que han antecedido a su elaboración y la traducción concreta de los compromisos algo genéricos por parte de las administraciones públicas".
ACTUACIONES EN EL ÁMBITO LABORAL
Sobre las actuaciones en el ámbito laboral, la comisión ha estimado que el establecimiento de planes específicos de actuación para la prevención del consumo de alcohol por personas trabajadoras menores de edad "entra de lleno en la organización de la prevención de riesgos laborales en la empresa, siendo ese el ámbito en que deberían regularse".
En lo que concierne a la necesidad de participación de todos los agentes involucrados, el órgano consultivo no comparte el "criterio excluyente" hacia las entidades relacionadas con el sector en las actividades de educación, prevención y sensibilización sobre el consumo de alcohol en menores de edad.
En este sentido, y "en coherencia" con los principios rectores del anteproyecto, el CES defiende que las entidades relacionadas, directa o indirectamente, con el sector "deberían participar en estas iniciativas, aportando su conocimiento y experiencia, y contribuyendo así a la efectividad de las campañas y políticas contempladas en la normativa".
PERJUICIOS DE LAS RESTRICCIONES EN LA PROMOCIÓN DE PRODUCTOS
También ha estimado conveniente realizar observaciones sobre los determinantes comerciales del consumo de alcohol en menores. A este respecto, se comparte la necesidad de limitar la exposición de los menores de edad a las estrategias, canales y mensajes para la promoción de los productos y consumo de alcohol perjudiciales para su salud, pero la Comisión considera que las restricciones previstas en el texto "podrían conllevar algunos perjuicios significativos para las actividades de producción y comercialización de bebidas alcohólicas, a la vez que la indefinición sobre ciertas previsiones introduciría inseguridad jurídica para los operadores".
Entre ellos, la prohibición de emplazamiento de publicidad de bebidas alcohólicas en lugares de la vía pública cercanos a zonas frecuentadas por personas menores de edad introduciría, a su juicio, "costes de adaptación onerosos para los establecimientos afectados".
"Al mismo tiempo, las limitaciones a la exposición de bebidas alcohólicas en establecimientos comerciales y hostelería implicarían un esfuerzo de reorganización de los lineales que, además de interferir en la estrategia de ventas de las empresas, puede conllevar gastos de adaptación del espacio o, incluso, resultar del todo inviable en los establecimientos de menor tamaño", añade el CES.
En este sentido, propone explorar una ponderación más equilibrada entre el objetivo de prevención del consumo de alcohol en menores de la norma y la mitigación de los impactos económicos y de seguridad jurídica derivados de algunas de sus previsiones y ve necesaria la "previsión de períodos transitorios suficientemente amplios y, en todo caso, superiores a los previstos actualmente en el anteproyecto para la entrada en vigor de todas aquellas medidas que conlleven costes de adaptación para los establecimientos existentes, así como su gradualidad".
Por último, el órgano señala que el equilibrio entre la dimensión educativa y restrictiva del anteproyecto ha suscitado también algunas observaciones.
Así, estima que la futura ley "debería reflejar un mayor equilibrio entre los mecanismos preventivos y los punitivos, siendo necesario salvaguardar los principios de proporcionalidad y gradualidad de las sanciones".
"La futura Ley debería, en definitiva, potenciar en mayor medida la vertiente educativa de la prevención, no siempre suficientemente concretada en el anteproyecto, que debería constituir la base del cambio de las actitudes y percepciones orientadas a la consolidación de hábitos saludables relacionados con el consumo de alcohol entre personas menores de edad", concluye el CES.