PEKÍN, 19 Sep. (EUROPA PRESS/Débora Altit) -
El escándalo por la leche adulterada con melamina en China, que ha afectado a más de 6.000 niños en el país, ha causado tal alarma que numerosas mujeres de Shanghai, madres trabajadoras e incapaces de criar a sus hijos, han comenzado a buscar nodrizas para alimentar a sus pequeños.
Según informa hoy el rotativo "Shanghai Youth Daily", las empresas encargadas de ofrecer servicios para el hogar están recibiendo las llamadas de madres ansiosas en busca de la madres de cría de toda la vida.
Las compañías, señala el diario, afirman que, aunque encuentren mujeres dispuestas a prestar semejantes servicios no las contratarían, por los riesgos que representan.
"Hemos recibido llamadas de madres. Los bebés ahora no pueden tomar la leche maternizada nacional, y la importada es demasiado cara, así que nos llaman buscando una mujer que alimente a sus bebés", comentó al periódico Li Rong, responsable de una de estas empresas. Li reconoce que se ha puesto a buscar candidatas, pero de momento no ha encontrado a ninguna interesada.
"Si hay un problema con la salud de la madre de leche, ¿quién es el responsable? Aunque supere los chequeos médicos el riesgo es grande, no se puede hacer un chequeo cada día", argumentó el jefe de otra empresa, Xia Jun. Xia se ha negado categóricamente a ofrecer estos servicios, a pesar de que, según cuenta, varias mujeres se han ofrecido para amamantar a bebés a sueldo tras haber escuchado que podían llegar a cobrar altas sumas.
El fenómeno no es único en Shanghai. Según informa el "Nanfang Dushi Bao", en la ciudad de Shenzhen (sur), donde sí se ofrece el servicio de las madres de cría, el aumento de la demanda ha hecho que el sueldo de las mujeres haya aumentado un 50%, hasta los 10.000 yuanes (algo más de 1.000 euros), un sueldo que sólo los altos cargos de empresa perciben.
A falta de nodrizas, algunos han optado por buscar otras soluciones, como indica el diario "Heilongjiang Morning", que señala que en Harbin, la capital de la provincia de Heilongjiang (norte) se están ofreciendo masajes especiales para intentar que las madres que han dejado de amamantar a sus hijos vuelvan a recuperar su leche.