MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha conseguido la primera sentencia que reconoce la enfermedad profesional a una delegada sindical contagiada por COVID-19 en el desarrollo de sus funciones.
Esta sentencia, del Juzgado de lo Social n. 1 de Toledo y fechada a 14 de febrero, supone "el reconocimiento de la labor sindical en defensa de la seguridad y salud de los trabajadores durante la pandemia", según explica CSIF en un comunicado.
La delegada de CSIF desarrollaba sus funciones en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo, visitando a los profesionales de la sanidad en sus puestos de trabajo.
Durante el mes de enero, cuando se contagió, tal y como destaca la sentencia, fueron habituales sus visitas al servicio de urgencias del centro hospitalario para garantizar el cumplimiento por parte de la administración de las medidas de prevención, siendo estas visitas más habituales a finales de mes, cuando el servicio de urgencias se hallaba colapsado por pacientes COVID-19.
"Para CSIF esta sentencia supone un reconocimiento a la labor fundamental de los delegados y delegadas sindicales supervisando las condiciones de trabajo de los profesionales de la Sanidad durante la pandemia. Todos ellos estuvieron en primera línea sin las medidas de protección adecuadas por falta de previsión de nuestras administraciones. Además, en los peores momentos de la pandemia, los delegados sindicales se pusieron a disposición de los centros y en su inmensa mayoría complementaron su actividad de vigilancia de las medidas de salud con la atención a los pacientes", resalta el sindicato.
En este caso, la sentencia condena a la mutua Solimat, colaboradora del Servicio de Salud de Castilla La Mancha, a la asunción de las prestaciones correspondientes derivadas desde la enfermedad profesional. Esta sentencia, además, supone "un reconocimiento fundamental para la futura protección en caso de secuelas graves o las indemnizaciones derivadas del fallecimiento".
Esta sentencia se suma a la conseguida en mayo de 2021 por CSIF, que supuso el primer reconocimiento de la enfermedad profesional a un trabajador de ámbito sanitario contagiado por COVID-19 en toda España. Dicha sentencia fue dictada por el Juzgado de lo Social número 3 de Talavera de la Reina (Toledo).
Fue en febrero del año pasado cuando el Gobierno reconocía el contagio de COVID-19 como enfermedad profesional para el personal que presta sus servicios en centros sanitarios y sociosanitarios, algo que desde CSIF reclamaban desde el inicio de la pandemia.
"Sin embargo, existen numerosas trabas por parte de la Seguridad Social y los servicios de prevención de las administraciones y empresas para el reconocimiento de esta contingencia profesional, produciéndose una infradetección de casos, que no se reflejan en las estadísticas del Ministerio de Trabajo y que obligan a acudir a la vía judicial", denuncia CSIF.