LOS ÁNGELES/GINEBRA, 18 Jul. (Reuters/EP) -
El número de fallecimientos por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) ha disminuido durante los últimos seis años, al pasar de los 2,3 millones en 2005 a 1,7 en 2011, según ONUSIDA, quien ha presentado este miércoles un informe, que señala además que cerca de 34 millones de personas conviven en el mundo con esta enfermedad.
Con motivo de la próxima reunión de este organismo en Washington (Estados Unidos), ONUSIDA ha destacado también la reducción del número de fallecidos del año 2011 al 2010 (unas 100.000 personas).
El informe resalta también la disminución del número de personas infectadas por VIH en el mundo y el mayor acceso a los medicamentos retrovirales, especialmente en el África Subsahariana. De este modo, cerca de 8 millones de personas de países en vías de desarrollo están en estos momentos recibiendo estos medicamentos. No obstante, Naciones Unidas ha establecido el objetivo de incrementar esta cifra a los 15 millones para 2015.
AUMENTO DEL VIH EN JÓVENES
Sin embargo, el director ejecutivo adjunto de ONUSIDA, Paul De Lay,
ha advertido de que el progreso conseguido en el tratamiento de la enfermedad podría estar en peligro por el aumento registrado en jóvenes, especialmente de Europa del Este y Estados Unidos.
Con todo, las autoridades sanitarias están barajando la posibilidad de utilizar los medicamentos antirretrovirales en personas que no estén infectadas con el virus aunque temen el riesgo de contagio. En este sentido, a principio de esta semana, las autoridades reguladoras estadounidenses han aprobado por primera vez utilizar 'Truvada' de Gilead para prevenir el VIH.
Asimismo, los investigadores están trabajando con el objetivo de utilizar los anticuerpos del VIH para prevenir la infección y, por primera vez en años, han reconocido que sus esfuerzos podrían traducirse en una vacuna.
ANTIRRETROVIRALES PARA DISMINUIR LA TRASMISIÓN
Por su parte, la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, ha apostado por la utilización "estratégica" de los tratamientos antirretrovirales para acabar con la trasmisión del VIH.
"Por cada persona que empieza un tratamiento, otras dos resultan infectadas. Ampliar la cobertura y hacerla más estrategia podría cambiar radicalmente esta situación. Tenemos la prueba de que las mismas medicinas que utilizamos para salvar vidas y para mantener a las personas sanas pueden detener la trasmisión del virus y reducir las posibilidades de pasarlo de una a otra persona", ha argumentado Chan.
De esta manera, un estudio realizado en varios países, en 2011, por la Red de Ensayos de Prevención del VIH demostró que los antirretrovirales cortaban la trasmisión del VIH en un 96 por ciento en parejas en las que uno de ellos era VIH positivo y el otro no estaba infectado. Un estudio posterior realizado en Sudáfrica confirmaba estos hallazgos.
"Cuando las personas toman antirretrovirales, se disminuyen las posibilidades de trasmitir el virus al otro", ha señalado el director del Departamento de VIH de la OMS, Gottfried Hirnschall, quien ha señalado que "si se puede conseguir y mantener a más personas en el tratamiento, se puede reducir el número de personas infectadas".
MAYOR ACCESO DE ESTOS MEDICAMENTOS
No obstante, la prioridad sigue siendo la de tratar al mayor número de personas infectadas con el VIH. Una prueba de ello es que el mayor acceso a los tratamientos en Africa Subsahariana, se ha traducido en un 31 por ciento menos da fallecidos en 2011 en comparación con 2005.
De este modo, la región ha conseguido en este aspecto más avances que en otras partes del mundo, señala el director del Departamento de VIH de la OMS, quien apunta a que el 62 por ciento accede ya al tratamiento.
Por su parte, en Europa Central y Occidental así como en Estados Unidos, el número de muertes relacionadas con esta causa ha variado ligeramente durante los últimos años. En el caso concreto del año pasado, esta cifra se situó en 29.000 personas, según Naciones Unidas.
Asimismo, el número de muertes se estabilizó en Asia y se sitúo en 330.000. Sin embargo, en Europa del Este, Asia Central, Oriente Medio y el Norte de Africa sigue aumentando. Por último, cerca de 330.000 niños resultaron infectados por VIH en 2011, una cifra inferior comparada con la de 2003 (570.000).