MADRID, 15 May. (EUROPA PRESS) -
El próximo viernes España debería haber traspuesto la directiva europea que fija las nuevas normas sobre los productos del tabaco, sin embargo fuentes del Ministerio de Sanidad consultadas por Europa Press confirman que "se trabaja para que esté listo lo antes posible", aunque "requiere cambios legislativos que no se pueden abordar ahora" por encontrarse el Gobierno en funciones.
La Directiva endurece las normas relativas a la manera de fabricar, producir y presentar en la UE este tipo de productos -cigarrillos, tabaco de liar, tabaco de pipa, puros, puritos, tabaco de uso oral, cigarrillos electrónicos y productos a base de hierbas para fumar- e introduce normas aplicables a determinados productos relacionadas con el tabaco.
El ministro de Sanidad en funciones, Alonso Alonso, admitía el jueves que, por un lado, "hay una disposición reglamentaria que se está tramitando" y que espera que "en muy breve plazo" llegue al Consejo de Estado para tramitarse mediante Real Decreto (RD); pero, por otro lado, algunos aspectos de la directiva necesitan "un modificación legal" y, actualmente, "no hay Parlamento para poder hacerla". "Esta es una tarea urgente cuando llegue el nuevo Gobierno, nosotros seguimos tramitando la disposición reglamentaria al RD", explicaba.
Consultado el ministerio sobre los trámites, explican a Europa Press que "está siendo un trabajo muy complejo, con la dificultad añadida, en esta última etapa, de las limitaciones que tiene un Gobierno en funciones, ya que la trasposición requiere cambios legislativos que no se pueden abordar ahora". Actualmente, añade la misma fuente, están tramitando un Real Decreto por el que se trasponen los aspectos que no conllevan cambios en la Ley.
"La directiva se va a trasponer al ordenamiento jurídico español con rango de RD, cuyo proyecto ya ha pasado por trámite de audiencia pública. Revisadas todas las propuestas de los diferentes agentes (Administración general y autonómica, sociedades científicas e industría, etc) que han sido recibidas hasta diciembre de 2015, se han incorporado al proyecto y se continúa con su tramitación", señala el portavoz de Sanidad.
¿SE EXPONE ESPAÑA A UNA SANCIÓN?
"Se está en contacto con todos los Estados miembros para verificar la situación, también con España", explica a Europa Press el portavoz de Salud de la Comisión Europea, Enrico Brivio, quien añade que "en caso de falta de la transposición puede abrirse procedimiento de infracción a los Estados que no hayan cumplido con el plazo".
Sin embargo, fuentes europeas consultadas por Europa Press, afirman que, aunque el procedimiento podría hacerse el día después de finalizar plazo, en la práctica esto no ocurre de manera automática. Así, hablan de la posibilidad de conceder un "periodo de tolerancia", en especial a los países que, como España, trabajan en la transposición.
Lo cierto es que el Gobierno podría haber traspuesto la directiva desde su entrada en vigor en 2014, sin embargo en estos dos años no se ha terminado de concretar. España no es el único país en esta situación. Según el portavoz de la Comisión, en este momento, "el número de notificaciones oficiales de transposición son ocho", aunque saben que muchos países están en proceso.
Los países que no la han traspuesto se exponen a que la Comisión les solicite observaciones sobre el problema del incumplimiento en un plazo máximo de dos meses; si la respuesta es insatisfactoria, se da dos meses más al país para ajustarse a la directiva. El siguiente paso es un procedimiento contencioso, aunque rara vez se llega tan lejos.
En los últimos años, más del 85% de los asuntos se solucionaron antes de la fase contenciosa. Finalmente, la Comisión puede solicitar al Tribunal de Justicia que imponga el pago de una suma a tanto alzado o de una multa coercitiva, esto puede tardar hasta dos años.
LOS CAMBIOS EN CAJETILLAS, DE APLICACIÓN AUTOMÁTICA
Desde Europa una de las razones más imperiosas para endurecer las normas sobre los productos del tabaco es el impacto negativo que el consumo de tabaco tiene en la salud de las personas y, concretamente, el objetivo es hacer que los productos del tabaco y su consumo sean menos atrayentes para los jóvenes.
En este punto todos los afectados están de acuerdo, no solo las sociedades médicas, también la industria relacionada con productos del tabaco está a favor del mayor control del tabaco y de endurecer su acceso a menores. También coinciden a la hora de pedir a España la trasposición de la normativa cuanto antes, unos por la inseguridad jurídica que puede suponer como industria y, otros, por la necesidad de medidas más estrictas.
Aunque la Directiva es amplía en contenido y restricciones, desde Bruselas se señala el impulso de su desarrollo principalmente por la existencia de "nuevas pruebas científicas" sobre los aromatizantes del tabaco y la eficacia de las advertencias sanitarias; y, por otro lado, ante la irrupción de nuevos productos, como los cigarrillos electrónicos.
En lo que respecta al aumento de las advertencias en las cajetillas de tabaco y picadura de liar, aunque la directiva no está traspuesta al ordenamiento jurídico nacional, estos artículos por jurisprudencia europea son de aplicación automática. Así, desde el viernes es de obligado cumplimiento que incluyan las nuevas advertencias sanitarias y pictogramas. No ocurrirá lo mismo con el tabaco de pipa, puros y puritos que se seguirán fabricando de la misma manera a falta de la trasposición.
En estos casos, Sanidad recuerda que "el proyecto que se está tramitando contempla una ampliación del periodo tanto de fabricación como de comercialización con el etiquetado de acuerdo a los dispuesto en el mencionado RD hasta de tres meses, con el fin de facilitar la adaptación del etiquetado y empaquetado al nuevo ordenamiento".
El 20 de mayo de 2017 ya no puede haber cajetillas con el actual diseño; en 2019 se introduce de obligado cumplimiento unos códigos de trazabilidad en cajetillas de cigarrillos y picadura de liar y para puritos y picadura de pipa el 20 de mayo del 2024. En cuanto a la prohibición de los productos mentolados entraría en prohibición partir del 20 de mayo del 2020.
El portavoz de la Mesa del Tabaco, Juan Páramo, afirma a Europa Press que los preceptos relativos a las advertencias son "claros, precisos e incondicionales". Así, aunque la medida les parece "desproporcionada" y "poco eficaz" en la protección de la salud, otras como los códigos de trazabilidad les parece importantes contra el comercio ilícito".
Desde el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) entiende que esta directiva, "sin ser totalmente perfecta", representa un "paso decisivo en la buena dirección", mientras la presidenta de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), Inmaculada Alfageme, considera que "resulta crucial aprovechar este momento legislativo para que España vuelva a liderar la lucha contra el tabaquismo". Así, en ambos casos discrepan de la patronal del tabaco y piden la implantación de cajetilla genérica.
¿Y QUÉ PASA CON LOS CIGARRILLOS ELECTRÓNICOS?
En lo que respecta a los cigarrillos electrónicos, constituyen una categoría de productos relativamente nueva cuya cuota de mercado está aumentando, Bruselas ha establecido requisitos de seguridad y calidad aplicables a los cigarrillos electrónicos que contienen esta sustancia.
El presidente de la Asociación Nacional del Cigarrillo Electrónico (ANCE), Alejandro Rodríguez, da la bienvenida a la entrada en vigor de la Directiva Europea, "pues establece un marco normativo estricto, equilibrado, y específico, y les dota de categoría propia y totalmente diferenciada de las normas aplicables al tabaco". Así, considera que "es importante que España trasponga la directiva lo antes posible y lo haga de manera literal al texto comunitario".