MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME) ha señalado que "comparte la forma y fondo" de la carta de veinte reputados científicos españoles en la revista 'The Lancet', donde han reclamado que se realice una "evaluación independiente e imparcial" por parte de un grupo de expertos internacionales y nacionales sobre la actuación del Gobierno y de las 17 comunidades autónomas en la gestión de la pandemia de COVID-19.
A través de un comunicado, FACME reconoce "la necesidad de una auditoría externa independiente que detecte oportunidades de mejora en la respuesta frente a posibles nuevas pandemias".
"Por ello, como entidad que agrupa a 46 sociedades científico-médicas de España representando a más de 100.000 profesionales médicos, FACME se muestra a disposición de las autoridades sanitarias españolas para colaborar en el análisis y búsqueda de opciones de mejora", señala.
Los firmantes de la carta abogan por una "evaluación independiente e imparcial" en tres áreas: gobernanza y toma de decisiones, asesoramiento científico y técnico, y capacidad operativa. "Además, se deben tener en cuenta las circunstancias sociales y económicas que han contribuido a aumentar la vulnerabilidad de España, incluido el aumento de las desigualdades", añaden.
En concreto, abogan por revisar "las funciones de salud pública, el liderazgo y la gobernanza, la financiación, la fuerza de trabajo sanitaria y social, los sistemas de información sanitaria, la prestación de servicios, el acceso al diagnóstico y el tratamiento, el papel de la investigación científica y la experiencia y los valores de las personas, las comunidades y los grupos vulnerables".
Los autores puntualizan que esta evaluación "no debe concebirse como un instrumento para repartir culpas". "Más bien debería identificar las áreas en las que es necesario mejorar la salud pública y el sistema de atención sanitaria y social. Aunque este tipo de evaluación no es habitual en España, varias instituciones y países, como la Organización Mundial de la Salud y Suecia, han aceptado la necesidad de tal examen como medio para aprender del pasado y prepararse para el futuro", insisten.
En última instancia, instan al Gobierno a que considere esta evaluación como "una oportunidad que podría conducir a una mejor preparación para la pandemia, a la prevención de muertes prematuras y a la construcción de un sistema de salud resistente, con la evidencia científica como eje central".