MADRID 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha defendido que las mutuas laborales puedan gestionar parte del proceso de incapacidad temporal de origen traumatológico en la población activa "siempre bajo la supervisión del Sistema Nacional de Salud", al tiempo que ha recordado que las bajas médicas "están exclusivamente en manos de los profesionales sanitarios del SNS".
Así lo ha asegurado García durante una interpelación en el Senado, tras ser preguntada por la senadora de EH Bildu Idurre Bideguren sobre el acuerdo al que llegó el Ministerio de Seguridad Social y las mutuas laborales para gestionar bajas de origen traumatológico.
"Si bien nosotros hemos estado puntualmente informados, no es el Ministerio de Sanidad el que tiene competencia en esta materia. Desde el punto de vista sanitario, lo que este acuerdo ha buscado es estructurar y estandarizar una práctica que ya se estaba llevando a cabo en algunas comunidades autónomas de manera más o menos irregular y sin suficiente supervisión", ha detallado García.
Así, la ministra de Sanidad ha aclarado que el acuerdo del pasado 18 de septiembre pretende garantizar "un marco claro" y "dar transparencia para realizar una mejor supervisión". García ha detallado que, en términos prácticos, el acuerdo permitirá que, en situaciones de incapacidad temporal asociadas a patologías únicamente traumatológicas y siempre con el consentimiento informado tanto del médico como del paciente, "las mutuas puedan realizar procedimientos diagnósticos y terapéuticos rehabilitadores bajo la supervisión del SNS".
Pese a ello, García ha recalcado que la decisión sobre las altas y las bajas médicas va a seguir siendo exclusivamente de los profesionales de la sanidad pública, "garantizando que la gestión de la incapacidad temporal siga en manos del Sistema Nacional de Salud".
Por su parte, la senadora de EH Bildu Idurre Bideguren ha mostrado su preocupación por si este acuerdo provoca "una privatización de la Seguridad social y del sistema de salud". "Estos convenios claramente son una intromisión del sistema público de salud y afectan al modelo de asistencia sanitaria, con el riesgo de crear poco a poco un sistema de salud de dos velocidades, uno más ágil para la población laboral activa, para que se recupere lo antes posible y otra para el resto", ha indicado Bideguren.
En este punto, García ha asegurado que comparte la preocupación por la privatización del SNS. "Permítame decirle que comparto 100% su preocupación y que comparto realmente la necesidad que tenemos de fortalecer nuestro sistema público de salud sin ceder ni un ápice en sus principios de equidad y de justicia social. Quiero reiterar el compromiso de este Ministerio con un sistema de salud público universal y equitativo", ha resaltado la ministra.