ZARAGOZA, 23 Mar. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Salvador Alcaide) -
El director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ha reclamado una modificación legal que otorgue una protección social y laboral para las personas que deciden donar un órgano en vida similar a las que tienen las mujeres durante el embarazo y postparto, para evitar que tengan problemas en sus puestos de trabajo por este motivo.
Durante la XIV Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplante y Profesionales de la Comunicación que se celebra en Zaragoza, Matesanz ha apuntado que éste es un aspecto que podría servir para seguir potenciando este tipo de donación que, tras alcanzar su máximo histórico en 2014, ha bajado en los dos últimos años.
"Es gente que mientras se está haciendo las pruebas para donar un riñón o un fragmento de hígado tienen que perder muchos días de trabajo y luego el postoperatorio puede ser largo y sufrir complicaciones. Y no son enfermos, por lo que según el régimen laboral que tengan les puede suponer que les pongan todo tipo de problemas", ha reconocido.
El director de la ONT ha reconocido que este cambio normativo podría beneficiar a un número muy bajo de personas, ya que en España cada año donan en vida alrededor de 400 personas para un trasplante de riñón y 30-40 para el de hígado.
Según datos de la Asociación Española de Ayuda a Niños con Enfermedades Hepáticas y Trasplantados Hepáticos (HEPA), la mitad de donantes vivos tienen problemas laborales serios y un 8 por ciento pierde su trabajo.
Matesanz ha asegurado que este cambio normativo ya se intentó introducir en 2012 pero no fue posible porque es un tema en el que también necesitan implicar al Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
"Cualitativamente es mejor una donación de vivo que de cadáver, son aspectos para seguir intentando que la donación de vivo se potencie y la protección social puede ayudar", ha zanjado.