MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Consejo General de la Psicología (COP) ha reclamado la inclusión de la figura del psicólogo educativo en los colegios e institutos, ante el aumento de los casos de suicidio y de autolesiones en jóvenes tras la pandemia por Covid-19, en el marco de la Jornada 'Salud Mental en Contextos Educativos: Contribución de la Psicología al bienestar emocional y al rendimiento académico', celebrada en la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
"El sistema educativo se merece especialistas en salud mental. Es urgente la presencia de los psicólogos para poder mejorar el sistema. Los diferentes agentes sociales no deben ni pueden mirar a otro sitio, y desde el COP consideramos a la psicología educativa un área prioritaria donde impulsar toda la investigación y acciones necesarias para aumentar el bienestar de la comunidad educativa", ha apuntado el presidente del COP, Francisco Santolaya.
Por ello, han redactado un manifiesto donde detallan por qué es necesario este profesional. Según el COP, son "numerosas" las necesidades y problemáticas que se producen en estos contextos que "requieren" de una atención especial: abandono escolar, trastornos emocionales, acoso escolar, ciberbullying, prevención de violencia de género, violencia filioparental, prevención del suicidio, adicciones a nuevas tecnologías, prevención de consumo de drogas y 'burnout' del profesorado, entre otras. "Como vienen constatando diversos estudios e informes, la crisis provocada por la Covid-19 ha incrementado este tipo de necesidades y problemáticas", insisten.
Se trata de un manifiesto firmado por la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA), la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA), la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE), Sindicato de Estudiantes, STES-Intersindical, el Sindicato Independiente de Enseñanza de Madrid, la Federación de Enseñanza de USO, la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos (FEDADi), Teléfono de la Esperanza y la Asociación Científica de Psicología y Educación (ACIPE), además de por el COP.
A este respecto, en el marco de la jornada, la vicedecana de Investigación e Infraestructuras de la Facultad de Psicología de la UCM, Marta Giménez, ha apuntado que "la sociedad de hoy demanda muchas otras cosas además del currículum académico". "Hay que abordar otros muchos aspectos de la vida de los niños, como la regulación emocional, que es un pilar básico de la salud mental", ha continuado, para lamentar que "hay una incomprensión enorme" en este sentido.
"No hay una conciencia colectiva de que esto es necesario y relevante. Queda muchísimo por hacer, nos cuesta sudor y lágrimas que los centros educativos entiendan la relevancia de esto. Espero que el sistema educativo entienda el reto que tiene por delante, y que ayudemos a que se entienda que la figura del psicólogo educativo es esencial", ha remachado. "Es una pena perder la oportunidad de que profesionales bien formados tengan un impacto en la trayectoria de los niños y de los adolescentes. De hecho, es un crimen perder esta oportunidad", ha sentenciado.
Tal y como se recuerda en el manifiesto, el Consejo Escolar del Estado es conocedor de esta situación y también ha planteado que las Administraciones deben atender los problemas relacionados con la salud mental, que están incidiendo en la falta de motivación, en problemas de concentración y en síntomas depresivos, que en ocasiones pueden conllevar trastornos de conducta y comportamientos lesivos, reclamando además que se responda a las necesidades de organización de los recursos humanos de los centros generadas por la pandemia.
Así, en el documento se pide que las Administraciones educativas apoyen "de manera decidida" el desarrollo del Estudio PsiCE (Psicología en Contextos Educativos), dirigido a prevenir los problemas emocionales en contextos educativos, a la vez que se mejora el ajuste emocional y social, así como los procesos de aprendizaje del alumnado.
Asimismo, reclaman el desarrollo de programas de evaluación e intervención basados en la evidencia, como el que se va a aplicar en el Estudio PsiCE, dirigidos a mejorar el bienestar de la comunidad educativa.
Además, insisten en que estas acciones de evaluación e intervención sobre problemas psicológicos tienen que estar planificadas y dirigidas por personal experto en Psicología Educativa. "La incorporación de este profesional a los centros educativos puede regularse de diversas maneras, con la finalidad de mejorar el bienestar de la comunidad educativa, la educación emocional y la atención a la diversidad", afirman.
A juicio del COP, las Administraciones educativas competentes deben incorporar "progresivamente" a este personal experto en Psicología a las plantillas de los centros educativos, donde sus programaciones "deben reservar tiempos y espacios adecuados para el desarrollo de esos programas de evaluación e intervención, dirigidos a mejorar las competencias emocionales y el bienestar del profesorado, alumnado y familias".
Tal y como se ha puesto de manifiesto durante la jornada, la Organización Mundial de la Salud viene planteando desde hace tiempo que los centros educativos son los entornos más importantes para la promoción de la salud y las intervenciones preventivas entre niños y jóvenes, pues hay abundante evidencia que demuestra que los programas realizados en el ámbito educativo pueden influir sobre la salud mental positiva, reducir los factores de riesgo, los problemas emocionales y de conducta a través de un aprendizaje socioemocional e intervenciones ecológicas.
EXCESO DE CARGA BUROCRÁTICA
En el acto, por su parte, Toni González, presidente de FEDADi, ha recalcado que, cuando en los centros educativos aparece una situación de autolesión o intento de suicidio, "hay un exceso de carga burocrática para poner en marcha todo el protocolo".
Por otro lado, la presidenta de CEAPA, María Capellán, ha reivindicado la importancia de las familias en este ámbito, ya que "si la familia no tiene equilibrio mental, difícilmente se lo podrá transmitir a los hijos". Con todo, ha lamentado que la manera de educar actualmente "es la misma que en los 70". "Se está actuando de la misma manera que en los 70 cuando las cosas han cambiado de manera increíble. Tras la pandemia, nos hemos dado cuenta de que el alumnado tiene problemas psicológicos que no se han detectado a tiempo, y los equipos educativos no dan a basto", ha señalado.
OTRAS REIVINDICACIONES DEL MANIFIESTO
Así las cosas, además de la inclusión de la figura del psicólogo educativo en los centros escolares, han reclamado otras mejoras para "favorecer unas condiciones más saludables en los centros educativos", entre las que destacan: no saturar los centros educativos con excesos de grupos de alumnado, respetando el número de líneas (grupos por curso) para el que está diseñado cada centro educativo; cubrir eficaz y rápidamente las bajas laborales de los docentes; reducir las ratios de alumnado por docente, incrementando el número de profesorado contratado; reducir la temporalidad del personal, de tal manera que se garantice la estabilidad laboral y la consolidación de equipos docentes en los centros educativos.
Otras de sus peticiones pasan por reforzar la orientación educativa y profesional al alumnado vulnerable; así como por dimensionar "proporcionalmente" los contenidos de los programas de las asignaturas a las posibilidades temporales de impartición y aprendizaje del alumnado, de tal manera que se evite programar más contenidos de los que realmente se pueden asimilar.