MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El PSOE ha registrado en el Congreso una proposición no de ley por la que insta al Gobierno a establecer ayudas económicas para aquellas pacientes de cáncer de mama que sufran alopecia como consecuencia del tratamiento de quimioterapia que se les ha proporcionado. El objetivo es que estas personas puedan acceder a prótesis capilares cuando sus recursos económicos no se lo permitan.
En la iniciativa, recogida por Europa Press, se exige que, antes de tratar esta materia con los gobiernos autonómicos, se presente en un plazo de seis meses un estudio que muestre los efectos de la alopecia secundaria a tratamiento sobre la salud (física y mental) de las pacientes de esta dolencia.
Además, pide que este trajo documente también la condición de las personas que presentan dificultades económicas para el acceso a las prótesis de cabello, en el contexto del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).
Los socialistas señalan que el cáncer de mama, el más frecuente entre las mujeres, supone un impacto en todas las esferas de la vida de la paciente ya que, además de lo que supone el diagnóstico, las enfermas sufren frecuentes efectos secundarios ante los tratamientos quirúrgico, radioterápico o quimioteráopico, como, por ejemplo, fatiga, náuseas o vómitos, así como la pérdida del pelo.
"Una vez terminada la quimioterapia, el cabello empieza a crecer aproximadamente a los cuarenta días después del último ciclo de tratamiento. Pero es necesario el uso de complementos, pañuelos y/o pelucas, durante unos 3-4 meses más, e incluso en periodos más prolongados", apuntan los socialistas.
UNA PRESTACIÓN DE RELEVANCIA
Las ayudas contra la alopecia tras estos tratamientos están recogidas en el apartado de ayudas asistenciales, es decir, aquellas que pueden recibir los mutualistas cuando se encuentran en un determinado estado de necesidad y carecen de los recursos indispensables; contemplando expresamente la adquisición de prótesis capilares para enfermos oncológicos afectados de alopecia secundaria.
Sin embargo, para el PSOE el acceso a una prótesis capilar durante el tratamiento de quimioterapia ha de entenderse como una prestación con singular relevancia para la calidad de vida de quienes padecen la pérdida de cabello como consecuencia de la misma.
"La mejora de la apariencia física incide en el mantenimiento de la autoestima y ha de tener necesariamente consecuencias positivas para el bienestar psicológico, el cual sin duda redunda en la manera de afrontar los tratamientos y la propia enfermedad", apunta la formación que dirige Pedro Sánchez.
Para los socialista esta situación viene además condicionada por un singular matiz de género, pues, aunque la alopecia secundaria puede resultar igualmente hiriente para los pacientes oncológicos varones, lo cierto es que por hábitos culturales e históricos, el cabello ha venido constituyendo un símbolo estético asociado a la imagen del sexo femenino.
