MADRID 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La especialidad de Medicina Preventiva y Salud Pública (MPSP) ha sido una de las especialidades menos demandadas en el MIR, según la Asociación de Residentes de Medicina Preventiva y Salud Pública (Ares-MPSP) que demanda abordar la brecha económica entre esta especialidad y otras, y solicita la posibilidad de realizar durante el primer año de residencia, telemáticas si se está realizando el máster en una ciudad distinta a la de la Unidad Docente y ayudas económicas para el desplazamiento y alojamiento a aquellos residentes que han de desplazarse durante el máster.
Asimismo aboga por el reconocimiento de la especialidad como requisito o como mérito en todas las oposiciones de Salud Pública y Administración Sanitaria y exigencia progresiva, proporcional y con excepciones para aquellas que sean para licenciado/graduado en medicina; y evaluar periódicamente las Unidades Docentes acreditadas para garantizar la calidad de la formación de sus residentes, valorando si tiene sentido mantener la oferta de algunas plazas con mayor escasez de recursos.
Además de aumentar la presencia de la Salud Pública en las aulas, dar a conocer el ámbito interdisciplinar y transversal de esta disciplina para que independientemente de que finalmente escojan la especialidad o no, conozcan la importancia de la visión poblacional y social de la Medicina. No solamente en el aula, también en las rotaciones, foros profesionales y debate público. Que las Facultades de Medicina se comprometan a que la asignatura de MPSP sea impartida por especialistas, además de ofrecer la posibilidad de que el estudiantado de Medicina realice prácticas en MPSP.
Por otro lado, han identificado algunos problemas crónicos que necesitan ser atajados. El primero la precariedad a la que se enfrentan que se ve amplificada en por el bajo salario percibido comparado con otras especialidades por la no realización de guardias de 24 horas junto con la creciente subida de alquileres e inflación. Las tardes dedicadas a los módulos de atención continuada (MAC), el equivalente a guardias en la especialidad, apenas permiten paliar estas diferencias con respecto a residentes de otras especialidades.
En muchas de las comunidades autónomas, el Curso Superior de Salud Pública obligatorio de 9 meses de duración se realiza fuera de la comunidad escogida. "Esto implica la movilidad a una ciudad distinta a la elegida, con el importante esfuerzo financiero que eso supone y con la imposibilidad de complementar el salario con MAC, todo ello sin ayudas económicas de cualquier tipo", añaden.
Asimismo han observado que existen Unidades Docentes con escasos recursos y sin una estructura formativa adecuada, cuyas acreditaciones no son revisadas. Por ejemplo, explican, "no deberían existir unidades docentes donde solo hay un especialista que ejerce la docencia para un MIR por año, y sin embargo, ocurre".
Finalmente, denuncian la falta de reconocimiento de la especialidad en el acceso a puestos de trabajo de Salud Pública, al no ser contemplada ni como requisito, ni como mérito en al menos 40-50% de los casos.
