NUEVA YORK, 15 Dic. (OTR/PRESS) -
Roncar puede causar más problemas que el molesto ruido. Un nuevo estudio realizado por la 'American Academy of Sleep Medicine' ha concluído que la intensidad de los ronquidos se relaciona directamente con la somnolencia sufrida durante el día, independientemente del índice apnea-hipopnea (AHI por sus siglas en inglés) en pacientes con apnea de sueño obstructiva (OSA). De esta manera, los investigadores han concluído que la somnolencia subjetiva se explica mejor por la intensidad de los ronquidos que por el AHI.
Los resultados de este estudio reflejan que la intensidad de los ronquidos objetivamente medidos en pacientes con OSA está muy relacionada con la somnolencia medida por la Escala de Somnolencia Epworth (ESS). Para llegar a esta conclusión, los investigadores analizaron a 507 parcientes que fueron remitidos al Hospital Nacional de Fukuoka al sospechar que padecían OSA. En esta investigación, se utilizó por primera vez el diagnóstico con polisomnografía, que se realizó entre septiembre de 2002 y enero de 2005. Asimismo se midió el nivel de somnolencia a través de la ESS y los sonidos de los ronquido de los pacientes.
Posteriormente, los pacientes fueron clasificados en función de que no se les hubiera detectado OSA o de manera muy leve (AHI inferior a 15) o de que sí se les hubiera diagnosticado OSA leve o moderada (AHI superior a 15). El objetivo era aclarar la gravedad de la OSA y la relación entre la intensidad de los ronquidos y la somnolencia mostrada por los análisis.
Tras estos estudios, los investigadores concluyeron que variables como la intensidad y frecuencia de los ronquidos, el tiempo diario de sueño y la obstrucción nasal son síntomas que representan el 22% de la varianza en las puntaciones de la escala de somnolencia. Sin embargo, la intensidad de los ronquidos y el AHI juntos podrían explicar "sólo" el 15% de la variación de las puntaciones en ESS.
RESULTADOS NO MUY SORPRENDENTES
Hiroshi Nakano, investigador principal y miembro del departamento de neumología en el Hospital Nacional de Fukuoka (Japón), asegura que los resultados del estudio indican que la somnolencia diurna se ve afectado no sólo por la gravedad de la OSA, sino también por la sonoridad de los ronquidos. "Los resultados no fueron tan sorprendentes, porque los estudios previos habían demostrado ya una relación entre el grado del ronquido y la somnolencia", explica Nakano en declaraciones a 'Journal of Clinical Sleep Medicine' recogidas por otr/press.
Los resultados del estudio también sugieren que la intensidad de los ronquidos está relacionada significativamente con la edad, con el índice de asa corporatal y con el AHI. Y aunque la somnolencia es uno de los síntomas más importantes de la OSA, los autores del informe señalan que esta relación se ha encontrado de manera muy débil en muchos estudios.
Ademas tras este estudio, los autores concluyen que las mediciones cuantitativas de los ronquidos son deseables en los estudios de sueño normal.