MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los adolescentes que desarrollan miocarditis tras recibir la vacuna de Pfizer-BioNTech contra la COVID-19 suelen hacerlo en los seis días siguientes a su segunda dosis, y la mayoría se ven "levemente afectados", según un análisis publicado este martes por la revista 'JAMA Cardiology'.
Esta enfermedad, poco frecuente, se caracteriza por una inflamación del músculo cardíaco que afecta a su capacidad de bombear sangre al organismo.
En este pequeño estudio de 15 adolescentes de entre 12 y 18 años, todos experimentaron dolor torácico en los seis días siguientes a la vacunación contra la COVID-19, mientras que dos tercios tuvieron fiebre y más de la mitad dolor muscular.
Los 15 pacientes del estudio fueron hospitalizados debido a la complicación cardíaca, pero todos fueron dados de alta tras una media de dos días sin necesidad de cuidados intensivos, y sólo uno tuvo síntomas persistentes.
Hasta mediados de julio, casi 9 millones de adolescentes estadounidenses habían recibido al menos una dosis de la vacuna de dos inyecciones, y algo más del 4 por ciento desarrolló miocarditis, según los datos publicados el viernes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Sin embargo, menos del 1 por ciento de los adolescentes de 12 a 17 años requirieron atención médica en la semana posterior a la recepción de cualquiera de las dos dosis de la vacuna.
Mientras tanto, alrededor de un tercio de los jóvenes que desarrollan una COVID-19 grave experimentarán un síndrome inflamatorio multisistémico, o MIS-C, un trastorno en el que múltiples órganos, incluido el corazón, muestran signos de inflamación, según un estudio publicado en julio por la revista 'Pediatrics'. Los niños con MIS-C relacionado con el coronavirus pueden tardar varios meses en recuperarse.