MADRID 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
Sustituir los carbohidratos y la grasa animal por grasa vegetal, como la de aceites de oliva y canola, nueces, semillas y aguacates, puede estar asociado con un menor riesgo de muerte en los hombres con cáncer de próstata metastásico, según un informe publicado en la edición online por 'JAMA Internal Medicine'.
"Cerca de 2,5 millones de hombres viven actualmente con cáncer de próstata en Estados Unidos, sin embargo, poco se sabe acerca de la asociación entre la dieta después del diagnóstico y la progresión del cáncer de próstata y la mortalidad general", como resalta el estudio.
Erin L. Richman, de la Universidad de California, San Francisco (UCSF), en Estados Unidos, y sus colegas examinaron el consumo de grasa después de un diagnóstico de cáncer de próstata en relación con el cáncer de próstata letal y la mortalidad por cualquier causa. El estudio incluyó a 4.577 hombres diagnosticados con cáncer de próstata no metastásico entre 1986 y 2010 que se inscribieron en el 'Health Professionals Follow-up Study'.
Los investigadores observaron 315 eventos con cáncer de próstata letal y 1.064 muertes durante una media de seguimiento de 8,4 años. La sustitución del 10 por ciento de las calorías de los carbohidratos por grasas vegetales se asoció con un riesgo un 29 por ciento menor de cáncer de próstata letal y un riesgo un 26 por ciento menor de muerte por cualquier causa, según los resultados de la investigación.
"En esta perspectiva, el consumo de grasas vegetales después del diagnóstico se asoció con un menor riesgo de cáncer de próstata letal y mortalidad por cualquier causa", destacan los autores. Los aceites y los frutos secos, según los investigadores, se encuentran entre las principales fuentes de grasas vegetales en la población estudiada.
Las tasas brutas de cáncer de próstata letal (por cada mil personas-año) que comparaban los quintiles más altos y más bajos de consumo de grasas fueron: 7,6 frente a 7,3 para saturada; 6,4 frente a 7,2 de monoinsaturados; 5,8 versus 8,2 de poliinsaturados; 8,7 frente a 6,1 por trans; 8,3 frente a 5,7 para los animales, y 4,7 versus 8,7 por grasa vegetal.
Para todas las causas de mortalidad, las tasas brutas de mortalidad (por mil personas-año) que comparaban los quintiles más altos y más bajos de consumo de grasas fueron: 28,4 versus 21,4 por saturado; 20 en comparación con 23,7 de monoinsaturados; 17,1 frente a 29,4 por poliinsaturados; 32,4 versus 17,1 para trans; 32 en comparación con 17,2 para los animales, y 15,4 frente a 32,7 para grasa vegetal, según los datos del estudio.
"En general, nuestros resultados apoyan el asesoramiento a hombres con cáncer de próstata a seguir una dieta saludable para el corazón en la que las calorías de hidratos de carbono se reemplacen con aceites insaturados y frutos secos para reducir el riesgo de mortalidad por cualquier causa. El beneficio potencial de consumo de grasa vegetal para el cáncer de próstata merece más investigación", concluyen los autores.