MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
UNICEF ha denunciado que la situación actual del cólera a nivel mundial "no tiene precedentes" debido a la "alarmante magnitud de los brotes, la propagación geográfica y la tasa extraordinariamente alta de muertes", por lo que el jefe de la Unidad de Emergencias de Salud Pública de UNICEF, Jérme Pfaffmann, ha reclamado de manera "urgentemente" 444 millones euros durante los próximos doce meses para la prevención inmediata del cólera.
Además, el portavoz de la ONG ha asegurado que el dinero irá destinado a respuestas de intervención en salud, agua y saneamiento, control y prevención de infecciones, comunicación de riesgos e implicación de las comunidades, y cambio social y de hábitos.
Según informa Pfaffmann, un total de 25 países ya han declarado brotes desde principios de 2023, además, según un nuevo análisis, otros 22 países en todo el mundo corren el riesgo de declarar brotes de cólera.
En los últimos años se había observado una disminución constante del cólera, pero esta tendencia se ha revertido, ya que en 2021 hubo un aumento de los casos que continuó en 2023.
UNICEF considera que si las tendencias continúan, especialmente ahora que África occidental está entrando en la temporada de lluvias, es posible que se superen el número total anual de países que luchan contra brotes de cólera registrado en 2022 y 2021.
El portavoz afirma que "ésta es una enfermedad de la que nadie debería morir", al tiempo que indica que las tasas de mortalidad superiores al 1 por ciento normalmente revelan problemas con la calidad, el acceso y la velocidad del tratamiento.
Además, junto a los brotes en muchos más países, UNICEF también constata que están muriendo más personas a causa del cólera que durante el pasado y pone como ejemplo que 3 de cada 100 personas infectadas con la enfermedad en Malawi (desde el inicio del brote en marzo de 2022) y Nigeria (en 2023) fallecieron.
Asimsimo, asegura que cuanto más tiempo pase sin el apoyo que necesitan para controlar y prevenir el cólera, más se extenderá la enfermedad, y más aumentaran las necesidades de fondos. Esto va más allá del dinero, esto va de las comunidades que necesitan apoyo.
En noviembre de 2022, UNICEF pidió a los donantes 150 millones de dólares (139 millones de euros) para responder al brote de cólera, pero recibió poco apoyo. Desde entonces, en tan solo seis meses, el llamamiento de fondos ha aumentado un 220 por ciento porque la situación se ha hecho más desesperada.
Para la ONG está situación va a empeorar debido a que el cambio climático es un multiplicador de fragilidad. Con las temperaturas más altas y cada vez más y más intensos impactos climáticos, habrá más servicios de agua y saneamiento dañados, más contaminación de fuentes de agua y más desplazamientos de poblaciones.
El cambio climático también está haciendo que "las temporadas de cólera sean menos predecibles". "Aunque muchas partes del mundo están en situación de baja transmisión de cólera, es preocupante que en otras muchas haya brotes durante periodos tradicionalmente marcados por una transmisión mínima o inexistente", ha indicado Pfaffmann.
Para UNICEF esta enfermedad es un marcador de pobreza y exclusión y afecta de manera desproporcionada a las comunidades pobres y vulnerables sin acceso a los servicios básicos y donde los sistemas de salud son más débiles.