MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una de cada seis personas padecerá un ictus, pero aproximadamente el 80 por ciento de los casos se puede prevenir, según ha señalado el jefe del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular de los Hospitales Quirónsalud Marbella y Quirónsalud Campo de Gibraltar, Rubén Rodríguez Carvajal.
Por ello, "es muy importante que los pacientes de alto riesgo (hipertensos, con colesterol alto o diabéticos) se sometan a programas de cribado mediante ecografía para prevenir un posible accidente cerebrovascular", ha señalado el experto.
Esta patología, que afecta a 15 millones de personas en el mundo cada año, se produce, en un tercio de las ocasiones, por una obstrucción de la carótida. Su tratamiento cuenta con tres modalidades distintas, de las que el doctor Rodríguez Carvajal ha destacado la Técnica de Revascularización Transcervical de la Arteria Transcarotídea (TCAR), debido a "sus ventajas frente a las otras dos. Es la más segura y novedosa técnica de tratamiento para esta patología".
Según ha explicado el especialista, el TCAR es una alternativa clínicamente probada, menos invasiva que la habitual cirugía abierta y más segura que el 'stenting transfemoral'. El procedimiento, que puede realizarse con anestesia local, se ejecuta a través de una pequeña incisión justo por encima de la clavícula. El cirujano coloca un tubo directamente en la arteria carótida y lo conecta a un sistema que temporalmente dirige el flujo sanguíneo lejos del cerebro para protegerlo de los desechos peligrosos que puedan desprenderse de la placa de ateroma.
"Este sistema de protección cerebral es la clave del éxito del TCAR y lo que marca la diferencia con el resto de tratamientos disponibles. Además, la TCAR tiene la tasa más baja de accidentes cerebrovasculares relacionados con el procedimiento (1,4%), según los estudios clínicos disponibles hasta la fecha", ha comentado el doctor.