La actividad física en el agua mejora la salud física y mental de personas con trastorno mental grave, según un estudio
MADRID 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
La actividad física en el agua mejora sustancialmente la salud física y mental de personas con trastorno mental grave, según han concluido dos estudios realizados por un equipo investigador del Parc Sanitari Sant Joan de Déu con el soporte de Fluidra, la Fundación Fluida y la Obra Social Sant Joan de Déu en el marco del proyecto Thalassa.
Según los hallazgos de los estudios, que han evaluado a más de un centenar de participantes a lo largo de dos años, estos beneficios para las personas con trastorno mental grave se producen porque la actividad acuática favorece la remisión de los síntomas y reduce las necesidades específicas determinadas por el tipo de trastorno.
Así, uno de los estudios, titulado 'Beneficios de la actividad física en medio acuático en personas con trastornos mentales', destaca que la práctica de natación y/o aquagym por parte de personas con diagnóstico de trastorno mental mejora significativamente la autoestima, reduce la percepción de estigma social, la ansiedad y les síntomas depresivos, mejora la percepción subjetiva del estado de salud general, e influye positivamente en una mejora del cuidado personal y las tareas de la vida diaria.
A su vez, realizar una actividad física en un centro deportivo comunitario promueve los beneficios derivados de las relaciones sociales y la participación en sociedad.
Este estudio, que ha contado con la participación de 87 personas, ha encontrado diferencias en los beneficios para hombres y mujeres. A este respecto, los hombres ven disminuida su percepción de estigma social y mejoran las relaciones sociales y la participación en sociedad. Mientras, en las mujeres, las mejoras se centran en la autoestima y las relaciones sociales.
Además, en función del diagnóstico, el estudio ha demostrado también que la actividad acuática tiene beneficios específicos. Las personas con trastorno depresivo mejoran en autoestima, reducen la percepción de autoestigma y reducen las dificultades para el cuidado personal y la realización de actividades de la vida diaria. Las personas con diagnóstico de esquizofrenia, en cambio, mejoran más en la percepción del estado de salud, las relaciones sociales, la realización de tareas diarias y en la participación en sociedad.
RESULTADOS AL COMBINAR AQUAGYM Y ENTRENAMIENTO METACOGNITIVO
Por otra parte, el estudio 'Eficacia de la combinación de la actividad de aquagym y el entrenamiento metacognitivo (EMC) sobre variables de salud psicológicas y físicas, y su relación con los biomarcadores SP1 y SP4 en personas con psicosis' ha evaluado un total de 23 pacientes y ha determinado que la combinación de ambos tratamientos potencia los efectos positivos de las mejoras en diferentes áreas en población con diagnóstico de esquizofrenia u otros trastornos psicóticos.
Entre los beneficios, destaca una reducción de los delirios y las alucinaciones y una mejorara de la motivación e implicación, así como una disminución de los síntomas depresivos, un incremento de la conciencia de trastorno y una mejora del funcionamiento cognitivo, las capacidades de adaptación y la interacción social y personal.
Asimismo, el estudio prueba que esta práctica provoca, en paralelo, un incremento significativo de otras actividades físicas como caminar. Estos beneficios auguran lo que podría ser un tratamiento integral de futuro para personas con estos diagnósticos.
Además de los dos estudios, el proyecto Thalassa ha permitido editar la primera 'Guía de Intervención para mejorar la coordinación en actividades deportivas en piscinas públicas', que incluye recomendaciones para realizar actividad física en medio acuático, asegura que los participantes hagan ejercicios y movimientos seguros y efectivos bajo la supervisión de profesionales capacitados y promueve la práctica deportiva entre personas en situación de vulnerabilidad.
Como continuación de estos dos estudios, el proyecto Thalassa pretende crear una línea de investigación centrada en profundizar en la influencia del género a la hora de definir los beneficios obtenidos. Adicionalmente, el estudio analizará qué actividades son más adecuadas para cada trastorno mental y qué beneficios obtiene cada grupo poblacional.