PAMPLONA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
Música, gastronomía y solidaridad se unen en la II Cena Benéfica a favor de la Asociación Navarra de Fibrosis Quística, que se celebrará el sábado 7 de febrero, a las 21.30 horas, en el Castillo de Gorraiz con cena y concierto de Chuchín Ibáñez y los Charros Navarros.
Además, se subastarán obras de pintores navarros y regalos donados por empresas y comercios, como cenas románticas con spa o electrodomésticos. La recaudación irá dirigida íntegramente al mantenimiento del programa de fisioterapia de la entidad, un servicio que no cubre la sanidad pública y que se convierte en "único arma junto a la medicación para frenar el avance de la enfermedad".
"Una familia no puede permitirse pagar a un fisioterapeuta al menos dos días por semana y es algo esencial para frenar la enfermedad, permitir que el niño haga una vida normalizada y no termine en un trasplante", ha explicado en un comunicado Cristina Mondragón, presidenta de la asociación.
La participación en la gala benéfica tiene un coste de 50 euros, incluye la cena, el concierto, los regalos y la donación. El dinero se puede ingresar con nombre y apellidos en la cuenta de la Caixa 2100 5179 06 2100054462, contando también con una 'fila 0'
"Es una gala para todo tipo de público, desde personas que quieran disfrutar de la buena gastronomía hasta quienes quieran bailar música mariachi, pasando por parejas que deseen pasar una bonita velada previa a San Valentín. Pero sobre todo es una buena forma de ayudar a unas personas que necesitan la fisioterapia para respirar", ha explicado Mondragón, quien añade que en la gala se rendirá homenaje al doctor Sánchez Valverde, pediatra de Virgen del Camino
La fibrosis afecta a uno de cada 3.000 nacimientos y cuenta con una veintena de casos en Navarra, la mayor parte niños y jóvenes. Conocida como la enfermedad del beso salado, la fibrosis afecta a pulmones y aparato digestivo, manifestándose principalmente en dificultades para respirar y teniendo como síntoma más evidente un sudor con alto contenido en sal.
Actualmente sin cura, la forma de frenar su avance es a través de los medicamentos, tomando cada afectado una veintena de pastillas diarias, y la fisioterapia semanal.
"La fibrosis quística ataca al aparato digestivo y a los pulmones por la mutación de un gen, generando en distintos órganos una mucosa que lleva al paciente a una infección crónica, que en casos avanzados puede conducir al trasplante de pulmón. La fisioterapia respiratoria ayuda a liberar esta mucosa, pero sobre todo enseña al propio paciente a detectarla y expulsarla a partir de unos ejercicios", ha señalado Mondragón.
Por ello, ha añadido, "es imprescindible para que el niño no caiga en continuas infecciones que le impidan acudir a clase y llevar una vida normalizada".
La asociación recibe de las arcas públicas unos 8.000 euros, insuficientes para sufragar los casi 20.000 euros que supone la contratación de especialistas que ofrezcan este servicio dos veces por semana a cada afectado. En este sentido, la gala celebrada el pasado año "fue el empujón necesario para mantener el servicio y ofrecer una vida mejor a las personas afectadas", éxito que esperan repetir en la presente edición.