MADRID, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio clínico de fase I muestra, por primera vez, cómo el tratamiento con un tipo de células madre denominadas células estromales mesenquimales es capaz de regular factores importantes que impulsan la inflamación en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) durante un periodo de tiempo.
El estudio, cuyos resultados se han publicado en la revista 'STEM CELLS Translational Medicine', aporta datos que pueden ayudar a desarrollar una nueva terapia celular para tratar la EPOC, que se encuentra entre las cinco primeras causas de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, y otras enfermedades crónicas de las vías respiratorias.
La EPOC es una enfermedad pulmonar inflamatoria crónica que obstruye el flujo de aire de los pulmones. Suele estar causada por la exposición prolongada a gases o partículas irritantes, en la mayoría de los casos el humo de los cigarrillos. Los síntomas incluyen dificultad para respirar, tos crónica, falta de energía, sibilancias e infecciones respiratorias frecuentes. Las personas con EPOC también corren un mayor riesgo de desarrollar otras enfermedades graves, como enfermedades cardíacas y cáncer de pulmón.
Existen tratamientos para ayudar al paciente a sobrellevar la EPOC, pero no hay cura y la enfermedad empeora progresivamente con el tiempo. Ante las limitadas opciones terapéuticas, los investigadores han estado explorando diversas terapias celulares como forma de regenerar el tejido pulmonar dañado por la EPOC. En particular, las células estromales mesenquimales (CEM) han llamado la atención.
Estas células madre adultas multipotentes están presentes en el cordón umbilical, la médula ósea, la grasa, los dientes y otros tejidos corporales. Su capacidad de secretar moléculas biológicamente activas que ejercen efectos beneficiosos en los tejidos lesionados y alivian la inflamación crónica las ha convertido en un candidato prometedor en la medicina regenerativa.
Los estudios preclínicos en los que se trató a roedores con EPOC con CEM demostraron que éstas aliviaban la inflamación y reducían el enfisema; sin embargo, estos resultados no se han traducido en estudios en humanos. El motivo no está claro, y es algo que se pone de manifiesto por la falta de estudios mecanicistas en humanos para determinar el impacto de las CEM en la inflamación de la EPOC.
El equipo de investigadores que está detrás de este último estudio había demostrado anteriormente que las infusiones de MSC se toleran bien en pacientes con EPOC y reducen los biomarcadores asociados a la inflamación sistémica y el estrés oxidativo.
"Esta vez queríamos delinear aún más los mecanismos subyacentes caracterizando las redes transcripcionales en estos pacientes, que son las proteínas que activan y desactivan los genes para asegurar que se expresen en la célula correcta en el momento y la cantidad adecuados, y explorar el papel de las CEM en la regulación de estas vías",señala el líder del estudio, el doctor Yuben P. Moodley, jefe de la Unidad de Biología Celular del Instituto de Salud Respiratoria, médico consultor en materia respiratoria del Hospital Fiona Stanley y profesor asociado de medicina respiratoria en la Universidad de Australia Occidental.
En el estudio, en el que participaron colegas del Hospital Real de Perth, nueve pacientes con EPOC estabilizada -todos los cuales habían participado en el estudio anterior- fueron tratados con una infusión de CEM extraídas de la médula ósea de donantes. Se analizaron los perfiles de expresión génica de las células mononucleares de sangre periférica (PBMC) durante la primera semana después de la infusión.
Los resultados indicaron que las CEM redujeron, efectivamente, importantes vías causantes de la enfermedad de las vías respiratorias crónicas y que los factores solubles derivados de las CEM pueden ser responsables de estos cambios. "Nuestra investigación también esbozó varios mecanismos paracrinos potenciales que pueden estar ejerciendo estos efectos, lo que demuestra el potencial terapéutico de los medios de cultivo de las CEM", explica el doctor Moodley.
Sin embargo, los resultados también revelaron que siete días después del tratamiento, los efectos beneficiosos de las CEM empezaron a disminuir.
"Esto coincide con un estudio reciente realizado en pacientes con shock séptico que recibieron infusiones de CEM, en el que los niveles de inflamación se redujeron de forma más destacada en torno a las 12 o 24 horas después de la infusión, y luego volvieron a los niveles de referencia en los días siguientes. Estos efectos son probablemente consecuencia de la rápida descomposición de las CEM tras la infusión intravenosa.
"Esto sugiere que las dosis frecuentes, tal vez semanales, pueden ser importantes para lograr un beneficio clínico en los pacientes con EPOC --apunta el doctor Moodley--. La información obtenida en este estudio justifica que se sigan investigando las CEM y/o sus factores secretados como una nueva intervención terapéutica en las enfermedades crónicas de las vías respiratorias", añade.
"Las células estromales mesenquimales son una terapia emergente para la inflamación crónica --destaca el doctor Anthony Atala, editor jefe de 'STEM CELLS Translational Medicine' y director del Instituto de Medicina Regenerativa de Wake Forest--. Los hallazgos del estudio son interesantes y proporcionan una visión novedosa de cómo las células madre trabajan para aliviar los síntomas asociados con la enfermedad crónica de las vías respiratorias en los pacientes".