MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
La reticencia de la población española a vacunarse contra la COVID-19 ha bajado cerca de 32 puntos desde septiembre de 2020. En aquel mes, hasta un 35,16% de los españoles no estaba dispuesto a vacunarse, mientras que en la actualidad este porcentaje es de sólo un 3,4%.
Así lo revela la tercera entrega del estudio 'Evolución de la percepción social de aspectos científicos de la COVID-19' de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), basada en entrevistas realizadas telefónicamente a más de 2.000 personas entre el 3 y el 21 de mayo de 2021.
La primera encuesta se realizó entre el 25 de junio y el 15 de julio de 2020 y la segunda entre el 4 y el 22 de enero de 2021, aunque también se ha ido preguntando en más ocasiones para así medir la evolución de la reticencia vacunal y sus factores sociales asociados.
Según las encuestas realizadas por la FECYT, el porcentaje de personas dispuestas a vacunarse ha ido oscilando en este último año. Por ejemplo, entre el 25 de junio y el 15 de julio del 2020, sólo un 6,6% desconfiaba de la vacuna, porcentaje que en la segunda quincena de julio aumentó a un 18,37%, llegando a un 35,16% en septiembre. A partir de este mes, el porcentaje de reticentes ha ido bajando: a un 32,46% en octubre de 2020, a un 8,7% entre el 4 y el 22 de enero.
Por el lado contrario, esto significa que el porcentaje de personas que sí están dispuestas a vacunarse ha ido aumentando en el verano del año pasado, cayendo en septiembre y octubre, y volviendo a subir a finales de año. Así, si un 32,2% confiaba en la vacuna (32,41% en la segunda quincena de julio del año pasado), el porcentaje bajó a un 24,17% en septiembre y a un 20,20% en octubre. En enero, el porcentaje ya se situaba en un 58,1%.
Según los resultados de esta tercera encuesta, un 49,9% de la población se inocularía la vacuna, a lo que habría que sumar un 32,8% de participantes que ha afirmado que ya se ha vacunado, dando un total de un 82,7%.
Con respecto a los motivos por los que los encuestados no se pondrían la vacuna, la mayoría (45,2%) atribuye su rechazo a los posibles riesgos que tiene para su salud, seguido de un 30,7% que indica que sabe identificar qué vacuna se pondría de cuál no. Además, un 7,4% cree que la vacuna no será eficaz y un 0,9% no considera que sea tan grave la enfermedad porque ya la ha pasado. También un 0,9% dice que se pondría la segunda o tercera vacuna, pero no la primera vacuna que salga.
UN 6,5% PIENSA QUE LA VACUNACIÓN ES INNECESARIA
No obstante, otro de los resultados que arroja el estudio es que un 6,5% de los participantes está de acuerdo con la afirmación de que la vacunación es innecesaria porque el coronavirus ya no es tan grave, frente a un 75,8% que rechaza esta afirmación.
Asimismo, un 5,5% dice estar de acuerdo con que ya no será necesario que se le vacune si mucha gente ya lo está. Pero la mayoría (74,2%) rechaza esta afirmación.
Igualmente, un 34,3% de los encuestados está totalmente seguro de que las vacunas contra el coronavirus SARS-CoV-2 recomendadas por las autoridades sanitarias son seguras. Por el contrario, un 7,6% reconoce estar totalmente en desacuerdo.