La unidad de Neonatología implantará un servicio de atención psicológica en 2017
PAMPLONA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
La aplicación de una nueva técnica de invasividad mínima para tratar las dificultades respiratorias que suelen presentar los bebés prematuros está permitiendo reducir el número de intubaciones que se realizan en la unidad de Neonatología del Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) y las complicaciones que se derivan de ellas.
Se trata de la técnica conocida como MIST por sus siglas en inglés (Minimal Invasive Surfactant Therapy), que consiste en aplicar el fármaco tensioactivo que se administra para el tratamiento de neonatos con síndrome de dificultad respiratoria (llamado surfactante) sin necesidad de intubarlos mediante un catéter rígido vascular.
Con esta técnica, además de poder utilizar un tipo de ventilación no invasiva, se produce una distribución rápida y efectiva del surfactante y se reducen los casos de displasia broncopulmonar y otras patologías asociadas a la intubación. "Venimos aplicando esta técnica desde hace unos meses y ya podemos decir que ha disminuido mucho el número de pacientes intubados y las complicaciones que suelen tener, con lo que mejora el pronóstico respiratorio de nuestros niños prematuros", explica Teresa Rives Ferreiro, jefa de sección de Pediatría del CHN.
La incorporación de esta técnica supone un nuevo hito en el programa de cuidados centrados en el desarrollo (CCD) que realiza la unidad de Neonatología del CHN, ha informado el Gobierno foral en una nota.
Este tipo de cuidados se centran en favorecer el desarrollo neurosensorial y emocional de los bebés ingresados, poniendo los medios para que sufran el menor estrés y dolor posible dentro de la situación crítica que atraviesan e implicando al máximo en todo este proceso a los padres y madres, que desde 2012 tienen las puertas de la unidad de neonatos abiertas las 24 horas para poder estar en contacto con sus hijos e hijas el tiempo que deseen.
En esta línea, la unidad tiene también previsto incorporar en 2017 un servicio de apoyo psicológico dirigido tanto a los padres y madres de los pacientes como a los propios bebés ingresados, con lo que se responde a una demanda que venían planteando tanto las familias usuarias como los profesionales del servicio desde hace varios años.
Precisamente hoy, la unidad de Neonatología está celebrando el Día Mundial de la Prematuridad con un reparto simbólico de patucos y la colocación de un muro donde los padres y madres de bebés ingresados han colocado fotos y mensajes dirigidos a sus bebés.
MÉTODO CANGURO, LACTANCIA Y TALLERES
La suspensión de las restricciones de horario en Neonatología ha permitido generalizar en la unidad prácticas como el método canguro, basado en el contacto piel con piel de los progenitores y los bebés. Este método se considera clave para reforzar el vínculo entre los padres y los recién nacidos en unos momentos que suelen ser traumáticos. También tiene efectos positivos en el desarrollo neuronal y afectivo del bebé, así como en su estado físico general, lo que a su vez suele reflejarse en una reducción de los períodos de ingreso, ha añadido el Ejecutivo.
La ampliación de horario también ha aumentado las posibilidades de establecer una lactancia materna exitosa. La unidad de Neonatología ofrece apoyo y asesoramiento a las madres tanto si tienen posibilidad de dar directamente pecho a sus bebés como si deben hacerlo indirectamente porque éstos tienen que permanecer en incubadora o su situación no les permite amamantar. Para ello, la unidad cuenta con un cuidado sistema de recogida y conservación de la leche que aportan cada día las madres de los bebés ingresados, así como una sala donde éstas pueden realizar las extracciones.
Para reforzar la implicación de las familias, la unidad viene organizando desde hace dos años talleres formativos bimensuales abiertos tanto a los padres de bebés ingresados como a los que ya han recibido el alta. En estas charlas se han abordado temas como la lactancia materna, la alimentación durante el primer año de vida, la seguridad en el hogar y en los traslados en coche, cuestiones de educación vial, el modo de realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar, la crianza natural o el abordaje psicológico de las situaciones que conlleva la prematuridad.
Para realizar estas sesiones, se ha contado con la colaboración de profesionales sanitarios del área de Pediatría del CHN, miembros de la Policía Foral e integrantes de la Asociación de Padres de Niños Prematuros de Navarra (APREM), cuyo psicólogo dirigió uno de los talleres.
El área de Neonatología del CHN cuenta con una plantilla de medio centenar de profesionales entre personal médico, de enfermería y auxiliar. Durante 2015, ingresaron en la unidad 523 recién nacidos con cuadros clínicos de diversa gravedad, lo que se representa un 10% de los casi 5.000 nacimientos por partos y cesáreas registrados en Navarra. Uno de cada diez ingresados fueron grandes prematuros, que son bebés de menos de 32 semanas de gestación con un peso inferior a los 1.500 gramos al nacer. Su hospitalización puede prolongarse entre 2 y 6 meses, si bien la apuesta por las altas precoces de niños que alcanzan 2 kilos de peso y no presentan complicaciones médicas está contribuyendo a reducir los plazos.