Un 'código postal' molecular lleva a las células T asesinas directamente a los tumores cerebrales

Archivo - Sala de Control médico y radiólogo, diagnóstico exploración del cerebro. - GORODENKOFF/ ISTOCK - ARCHIVO

MADRID 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) en Estados Unidos han descubierto una forma de programar células inmunitarias para que ataquen el glioblastoma y traten la inflamación de la esclerosis múltiple en ratones. Se trata de una especie de "GPS molecular" para guiar a las células inmunes al cerebro y matar tumores sin dañar el tejido sano. Tal y como se publica en 'Science', la tecnología se probará pronto en un ensayo clínico para personas con glioblastoma.

Esta terapia con células vivas puede navegar por el cuerpo hasta un órgano específico, abordando una de las principales limitaciones de las terapias contra el cáncer con CAR-T hasta ahora. La tecnología funcionó en ratones y los investigadores esperan que se pruebe en un ensayo clínico el año próximo. Los científicos demostraron que las células inmunitarias podían eliminar un tumor cerebral mortal llamado glioblastoma y evitar que volviera a aparecer. También utilizaron las células para reducir la inflamación en un modelo de ratón con esclerosis múltiple. "Las células vivas, especialmente las células inmunes, están adaptadas para moverse por el cuerpo, sentir dónde están y encontrar sus objetivos", comenta Wendell Lim, profesor de farmacología celular y molecular de la UCSF y coautor principal del artículo.

Los cánceres cerebrales se encuentran entre los más difíciles de tratar. La cirugía y la quimioterapia son riesgosas y los medicamentos no siempre pueden llegar al cerebro. Para evitar estos problemas, los científicos desarrollaron esta especie de " GPS molecular " para las células inmunes que las guiaba con un "código postal" para el cerebro y una "dirección" para el tumor. Encontraron el código postal molecular ideal en una proteína llamada brevicano, que ayuda a formar la estructura gelatinosa del cerebro y que sólo aparece allí. Para la dirección postal, utilizaron dos proteínas que se encuentran en la mayoría de los cánceres cerebrales.

De esta forma, los científicos programaron las células inmunes para atacar sólo si primero detectaban brevican y luego detectaban una u otra de las proteínas del cáncer cerebral. Una vez en el torrente sanguíneo, llegaron fácilmente al cerebro del ratón y eliminaron un tumor en crecimiento. Las células inmunitarias que permanecieron en el torrente sanguíneo permanecieron latentes. Esto evitó que los tejidos de otras partes del cuerpo que tuvieran la misma "dirección" proteica fueran atacados. Cien días después, los científicos introdujeron nuevas células tumorales en el cerebro y quedaron suficientes células inmunes para encontrarlas y matarlas, un buen indicio de que podrían ser capaces de impedir que las células cancerosas restantes vuelvan a crecer.

"Las células CAR-T activadas en el cerebro fueron muy, muy eficaces para eliminar el glioblastoma en nuestros modelos de ratón, la intervención más eficaz que hemos visto hasta ahora en el laboratorio", agrega el doctor Milos Simic, becario de diseño celular de la Fundación Valhalla y coautor principal del artículo. "Esto demuestra lo bien que el GPS aseguró que solo funcionarían en el cerebro. La misma estrategia funcionó incluso para eliminar las metástasis cerebrales del cáncer de mama".

En otro experimento, los investigadores utilizaron el sistema GPS cerebral para diseñar células que envían moléculas antiinflamatorias al cerebro en un modelo de ratón con esclerosis múltiple. Las células diseñadas alcanzaron su objetivo y la inflamación desapareció. Los científicos esperan que este enfoque esté pronto listo para pacientes con otras enfermedades debilitantes del sistema nervioso.

"Entre el cáncer, las metástasis cerebrales, las enfermedades inmunológicas y la neurodegeneración, millones de pacientes podrían algún día beneficiarse de terapias cerebrales dirigidas como la que hemos desarrollado", concluyen los investigadores.