MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
Becton Dickinson (BD) ha creado la nueva norma de Equipos de Infusión y Acceso Vascular (EIAV), presentada por la Sociedad Española de Infusión y Acceso Vascular (SEINAV) y que ha sido posible gracias a los tres proyectos pilotos realizados en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, el Hospital del Mar de Barcelona y el Hospital Universitario de Donostia.
"La norma es totalmente novedosa y representa un hito para nuestra profesión enfermera, porque ha sido creada por enfermeras y porque es la primera norma técnica que existe, al menos en Europa, para este tipo de equipos. También aporta que el liderazgo del proceso recaiga en los actores implicados, en las enfermeras que forman parte esos equipos. Proporciona indicadores relevantes que permiten modificar actuaciones, proponer mejoras, comenzar proyectos paralelos y crear documentos normativos. Los EIAV serán más eficientes y aportarán una atención más segura al paciente", ha dicho la presidenta de SEINAV, Camino del Río.
La mayoría de las actividades clínicas tienen un riesgo inherente y una gran cantidad de efectos adversos están relacionados con la presencia de una infección desarrollada en el hospital. La inserción de dispositivos de acceso venoso para administrar medicamentos, productos sanguíneos, nutrientes o fluidos está relacionada con la complicación conocida como Bacteriemia Relacionada con Catéter (BRC).
En este sentido, y con el compromiso de garantizar la seguridad del paciente, BD y SEINAV han apostado por crear sistemas de gestión encaminados a controlar este tipo de riesgos y por establecer un Equipo de infusión y acceso venoso (EIAV) en los hospitales, en una estrategia conjunta para conseguir la excelencia hospitalaria.
Los EIAV son equipos de enfermeros expertos en competencias de inserción y mantenimiento de catéteres intravasculares periféricos y centrales. Contar con procedimientos estandarizados entre los profesionales sanitarios especializados en catéteres contribuye a asegurar una buena actividad por parte de los expertos y promover la seguridad del paciente.
Esta normativa favorece la implantación de las mejores prácticas en acceso vascular y terapia intravenosa y en el que se recogen las directrices y requisitos para desempeñar las actividades en el ámbito asistencial, docente y de investigación por parte de los EIAV.
De hecho, recoge diferentes aspectos de la gestión del equipo, sus integrantes y funciones de cada uno de ellos, cómo debe realizarse el seguimiento para garantizar la seguridad del paciente, así como los términos para asegurar la calidad durante todos los procesos de la intervención.
Se estructura en ocho apartados: contexto, liderazgo, planificación, estructura y personas, operativa, investigación, desarrollo e innovación, evaluación del desempeño y medición del seguimiento y mejora continua. Cada uno de ellos dispone de puntos de norma a cumplimentar con hasta tres niveles de implementación: nivel básico, nivel medio y nivel avanzado.
Según el grado de cumplimiento del punto de norma, se logrará un nivel en cada uno de ellos. Además, y según ponderación del punto conseguido en cada apartado, el EIAV podrá conseguir uno de los tres niveles, para lo cual se ha utilizado un sistema de estrellas para la acreditación (de 1 a 3).
En concreto, la norma establece que los EIAV deben estar liderados por una enfermera gestora. Asimismo, también determina que las enfermeras que conformen el equipo pueden tener diferentes niveles asistenciales (básico y avanzado). Además, los equipos pueden contar con un perfil Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería.
Poniendo especial atención en evitar afectos adversos, la norma contempla un apartado en el que se marcan las condiciones que deben cumplir los diferentes espacios de trabajo, con el objetivo de que los equipos puedan realizar la actividad asistencial de manera fiable, eficaz y segura. En general, estas directrices maximizan la seguridad del paciente, estandarizando todos los materiales que deben estar disponibles por si se requiere de su uso, así como asegurando la limpieza del espacio de trabajo.
Se trata de una normativa viva y que busca la continua mejora y evaluación, adaptándose a las innovaciones médicas. Los EIAV deben realizar una evaluación del desempeño mediante el seguimiento, medición, análisis y evaluación de su actividad, mediante un sistema de gestión de la calidad y de la satisfacción del paciente. Todo este seguimiento se completa con una auditoría interna de los propios equipos para detectar oportunidades de mejora e implementar aquellas acciones necesarias para cumplir con los requisitos establecidos.
La norma se ha validado gracias a los tres pilotos realizados en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, el Hospital del Mar de Barcelona y el Hospital Universitario de Donostia, que se han acreditado con el nivel máximo de tres estrellas de excelencia. Auditores expertos en calidad asistencial de le empresa DNV han acompañado en el proceso de auditoría y evaluación de la conformidad de la norma.