ALICANTE 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Alicante y del Hospital de Albacete han desarrollado un innovador procedimiento para el relleno y sellado de cavidades pleurales, que consiste en inyectar nuevas espumas de poliuretano biocompatibles y de fácil aplicación que evitan infecciones, sangrados, dolor o fístulas en pacientes pulmonares.
Estas espumas con capacidad de autoexpansión y automodelación sustituyen agresivos tratamientos quirúrgicos y paliativos utilizados hasta el momento. Además, son biocompatible y cuentan con un riesgo muy bajo de toxicidad, según han informado la UA en un comunicado.
La aplicación de este material, han explicado, es muy sencilla, ya que se puede introducir por un pequeño orificio en el tórax. El catedrático de Química Inorgánica, José Miguel Martín Martínez, y el químico Alfonso de Lucas han indicado que "si bien existen diferentes espumas de poliuretano para uso médico, lo innovador de nuestro trabajo es que la espuma se genera en el momento de su colocación en la cavidad con la mezcla de dos componentes líquidos".
"Cuando se inyecta en el paciente y el material que está espumando toca las paredes húmedas de los tejidos circundantes --han continuado--, se crea una zona superficial muy compacta que actúa como molde para rellenar completamente todo el volumen de la cavidad pleural".
De esa manera, la espuma de poliuretano se adapta a todo el hueco y evita complicaciones en pacientes pulmonares como infecciones, inflamaciones, sangrados, dolor o fístulas". Además, el material no se adhiere a las paredes del tejido, impidiendo problemas de roturas si fuese necesaria su extracción.
EFICAZ Y POCO AGRESIVO
Los investigadores han apuntado que existen diversos procesos patológicos en los que la cavidad pleural presenta aire u otros líquidos biológicos como pus o sangre que se resuelven mediante simples drenajes.
Sin embargo, principalmente tras cirugías por cáncer de pulmón o infecciones pulmonares complicadas, se pueden acumular cantidades de líquido donde emergen gérmenes difíciles de erradicar incluso con antibióticos o drenajes. Llegados a este punto, los pacientes sufren un deterioro progresivo, dolor, fiebre, ahogo e incluso la muerte si no son tratados a tiempo.
El cirujano torácico del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, Carlos Rombolá, ha precisado que "el relleno y sellado de la cavidad pleural con la espuma de poliuretano evitaría la colección de líquidos y no dejaría espacios para el desarrollo de bacterias controlando la infección de forma definitiva".