MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Una cirugía mínimamente invasiva que combina el uso de un fármaco que destruye los coágulos y un catéter para drenar la sangre del cerebro de los pacientes con accidente cerebrovascular hemorrágico reduce la inflamación y mejora los pronósticos de los pacientes, según un estudio llevado a cabo por investigadores estadounidenses y que va a ser presentada en la International Stroke Conference 2019 de la American Stroke Association.
En concreto, los expertos de este ensayo de fase 3 estudiaron el tratamiento del accidente cerebrovascular hemorrágico a través de La cirugía invasor más Alteplase para la evacuación intracerebral de la hemorragia (MISTIE), en la que se coloca quirúrgicamente un catéter en el coágulo sanguíneo en el tejido cerebral y se administra la alteplasa, es la manera más eficiente de drenar la sangre del cerebro.
"Sabemos por investigaciones en personas y animales que los coágulos de sangre por hemorragia intracerebral (dentro del cerebro) son tóxicos para el tejido cerebral. La toxicidad de la sangre causa una inflamación en el cerebro que, junto con la hemorragia inicial, contribuye a resultados deficientes, como problemas del habla, dificultad para caminar e, incluso, parálisis", han dicho los expertos.
Los investigadores compararon los resultados del tratamiento estándar (pautas de la American Heart Association) con el procedimiento MISTIE en 500 pacientes con accidente cerebrovascular hemorrágico. De esta forma, confirmaron los resultados de su anterior estudio MISTIE de fase 2 que muestra que cuanto más sangre se extrae, mayor es la reducción de la hinchazón, independientemente del tamaño de la hemorragia inicial.
Los pacientes de MISTIE tuvieron una disminución mayor en la inflamación del tejido cerebral que los pacientes en el grupo médico. Los investigadores informaron que con cada 10 mililitros de mayor volumen de hinchazón, los pacientes tenían un 25 por ciento más de probabilidades de morir a los 30 días y un 15 por ciento más de probabilidades de morir 180 días después del accidente cerebrovascular.
"Para los pacientes, esta reducción en el volumen de sangre e hinchazón puede significar una recuperación más rápida con mejores resultados y un tiempo más corto para regresar a casa. MISTIE tiene el potencial de establecer el primer tratamiento viable para mejorar los resultados funcionales para los pacientes con accidente cerebrovascular hemorrágico", han zanjado los expertos.