MADRID 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de investigadores liderados por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha mostrado que las mujeres españolas presentan una adherencia "moderada" a las recomendaciones para prevenir del cáncer de mama, emitidas por el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer/Instituto Americano para la Investigación del Cáncer (WCRF/AICR), en el año previo al diagnóstico de la enfermedad.
El estudio, publicado en la revista 'Cancers', ha revelado que esta adherencia ha tenido una puntuación media de 3,5 sobre 7 puntos, siendo la recomendación con mayor cumplimiento la de limitar del consumo de bebidas azucaradas (el 54,4 por ciento de las mujeres no las consumía), mientras que la de menor cumplimiento fue la de mantener una dieta rica en fibra (el 4,4 por ciento consumía al menos 30 gramos diarios).
Cabe destacar que las mujeres mayores de 60 años han presentado una mayor adherencia global, mientras que aquellas con una ingesta calórica diaria superior a 2.000 kilocalorías o con dos o más comorbilidades mostraron una peor adherencia.
Las mujeres jóvenes han afirmado tener un mayor consumo de bebidas azucaradas y comida rápida, y las trabajadoras en activo han mostrado una peor adherencia a la recomendación de realizar actividad física de forma regular.
Por su parte, las fumadoras tienen una menor adherencia a las recomendaciones de limitar el consumo de alcohol, así como de mantener un consumo elevado de frutas y verduras.
En base a estos resultados, los científicos han señalado la importancia de desarrollar intervenciones específicas y adaptadas a las características sociodemográficas y clínicas de cada paciente, y han subrayado la importancia de considerar de tener un peso saludable debido a su influencia sobre el pronóstico.
"Las mujeres deben recibir asesoramiento y apoyo para mantener un peso corporal saludable mediante una dieta equilibrada y una actividad física adecuada. La influencia de diversas variables sociodemográficas y clínicas en el grado de cumplimiento, como la edad, el nivel educativo, la situación laboral, el hábito tabáquico, la ingesta energética y la presencia de comorbilidades, enfatiza la necesidad de abordar estas variables al diseñar intervenciones adaptadas a las características de estas pacientes, con el objetivo de mejorar su calidad de vida y pronóstico a largo plazo", han añadido.
Entre las recomendaciones del WCRF/AICR el mantenimiento de un peso saludable, realizar actividad física regular, seguir una dieta rica en vegetales, frutas, cereales integrales y legumbres, y limitar el consumo de alcohol, carnes procesadas, bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, lo que contribuye tanto a la prevención primaria como a mejorar los resultados de salud tras el diagnóstico.
La investigación ha tenido en cuenta los datos de 915 pacientes españolas, y en ella han participado el Hospital Universitario La Paz-Carlos III-Cantoblanco (Madrid), el Centro Nacional de Epidemiología del ISCIII, el Consorcio de Investigación Biomédica en Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP), la Escuela Internacional de Doctorado de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (EIDUNED), Idibell Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge, el Hospital Universitario Puerta de Hierro (Majadahonda), el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona), la Clínica Universidad de Navarra, el Consorcio Hospital Universitario Parc Tauli (Sabadell) y el Hospital Universitario La Fe (Valencia).