MADRID 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
La inteligencia artificial aplicada a la ecografía reducirá aún más la práctica de citología y operaciones de tiroides, según ha destacado la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) en el marco de la campaña '12 meses en Endocrinología y Nutrición, 12 pasos hacia la salud', que dedica el mes de julio a destacar la importancia de la incorporación de las imágenes por ultrasonido en el abordaje de las patologías endocrinológicas.
El coordinador del Grupo Imagen por Ultrasonidos de la SEEN, Jordi Reverter, ha incidido en que el ecógrafo es una herramienta fundamental en las Unidades de Tiroides, ya que en la consulta permite una exploración rápida, completa y no invasiva de los pacientes, que de otra manera tendría que realizarse por palpación. Por ello, las imágenes por ultrasonidos son fundamentales en el diagnóstico y seguimiento de la enfermedad nodular de tiroides tanto benigna como en los casos de cáncer, en el ámbito de la nutrición a través del estudio muscular o del tejido adiposo y es la base también del diagnóstico de la esteatosis hepática y la aterosclerosis.
Reverter ha incidido en que la incorporación de la técnica ecográfica en Endocrinología ya es una realidad, por lo que es fundamental extenderla a todos los servicios de la especialidad de España. No obstante, para conseguir que este tipo de tecnología convierta a los expertos en autónomos y activos en el proceso asistencial es fundamental que reciban una formación adecuada para que sean eficientes y, en el caso de aplicar un tratamiento, se reduzcan las eventuales complicaciones. "La formación en ultrasonidos debe formar parte del currículo del residente de Endocrinología y Nutrición, y tal vez podemos empezar a pensar en desarrollar la subespecialidad de endocrinología intervencionista", ha destacado.
Por su parte, la aplicación de tratamientos de ablación química o térmica guiados por ecografía están permitiendo reducir también las intervenciones de tiroides tanto en relación con los nódulos benignos como en algunos casos de cáncer. Por ello, gracias a la evolución que ha experimentado la Endocrinología, los profesionales además de interpretar análisis e informes radiológicos, pueden emplear también los ultrasonidos para liderar y ser parte activa, a través de la aplicación de tratamientos mínimamente invasivos, en el proceso patológico de los pacientes.