MADRID, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigación de la University of Texas at Arlington (Estados Unidos) va a estudiar cómo el tamaño de un dispositivo del narguile, también conocido como pipa de agua o cachimba, influye en la salud de su usuario.
"No hay mucha investigación sobre el uso del cachimba, a diferencia de los cigarrillos. Para que se regule, es necesario reunir pruebas sobre los efectos en la salud, el comportamiento, la adicción y la exposición a tóxicos, y cómo se relaciona con fumar cachimba", ha comentado Ziyad Ben Taleb, líder del trabajo.
El estudio tendrá dos vertientes. En primer lugar, se centrará en la idea de que el consumo de cachimba es menos perjudicial que los productos del tabaco, una idea errónea que, según él, se deriva de la creencia de los usuarios de que el humo se filtra a través del agua. En segundo lugar, abordará el aspecto de la comercialización.
Los minoristas intentan comercializar los productos de cachimba más pequeños como los mejores para los principiantes, haciéndolos parecer un "tamaño de iniciación" perfecto para personas que, de otro modo, serían novatas en el uso de pipas de agua o cachimba. "Esa fue la lógica que me llevó a pensar en realizar este estudio. Quiero saber cómo afectan los distintos tamaños de cachimba a los resultados de salud", explica Ben Taleb.
Durante el estudio de dos años, financiado por una subvención del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de Estados Unidos, los participantes que se identifiquen como consumidores habituales de cachimba harán tres visitas al centro.
En cada una de ellas, utilizarán un tamaño concreto de cachimba, ya sea pequeño, mediano o grande, y Ben Taleb y su equipo realizarán varias mediciones antes y después del uso, como los niveles de monóxido de carbono y la concentración de nicotina en el cuerpo del usuario.
También utilizaráb un dispositivo, diseñado por la Universidad Americana de Beirut, que, integrado en el propio cachimba, puede medir estadísticas en tiempo real, como el número de caladas, el volumen total inhalado y las pausas realizadas entre cada calada.
"Al final de nuestras sesiones de investigación, solemos dar a los participantes un folleto con datos sobre el tabaquismo y el abandono del tabaco. Queremos cambiar el comportamiento, en última instancia, y por eso recogemos datos", detalla otro de los autores, Danny Dabroy.
