La metformina podría ser útil para reducir la gravedad de pacientes con COVID-19

Archivo - Representación creativa de las partículas del virus del SARS-CoV-2, causante de la COVID-19.
Archivo - Representación creativa de las partículas del virus del SARS-CoV-2, causante de la COVID-19. - NIAID - Archivo
Publicado: jueves, 18 agosto 2022 15:49


MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

La metformina, un medicamento para la diabetes que se prescribe habitualmente, reduce las probabilidades de visitas a los servicios de urgencias, hospitalizaciones o muerte por COVID-19 en más de un 40 por ciento, y en más de un 50 por ciento si se prescribe al inicio de los síntomas, según un estudio dirigido por la Facultad de Medicina y la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Minnesota (Estados Unidos).

El estudio, publicado en la revista científica 'The New England Journal of Medicine', no encontró ningún efecto positivo del tratamiento con ivermectina o con dosis bajas de fluvoxamina frente a la COVID-19.

El ensayo, denominado 'COVID-OUT', ha sido el primero de Estados Unidos en el que se estudió si la metformina, un medicamento para la diabetes de tipo 2; la fluvoxamina a dosis bajas, un antidepresivo, y la ivermectina, un antiparasitario, o sus combinaciones podían servir como posibles tratamientos para prevenir las visitas a urgencias o la hospitalización, así como contra la COVID-19 persistente.

El diseño del estudio era sencillo: los pacientes fueron asignados aleatoriamente a recibir uno de los tres fármacos por separado, un placebo o una combinación de metformina y fluvoxamina o metformina e ivermectina. Aunque el estudio estaba controlado por placebo con píldoras de placebo exactamente iguales, el 83 por ciento de los voluntarios recibieron medicamentos respaldados por los datos existentes debido al diseño de seis brazos.

Cada participante recibió dos tipos de píldoras para mantener enmascarada la asignación del tratamiento, durante 3 a 14 días de tratamiento. Cada voluntario realizó un seguimiento de sus síntomas y, tras 14 días, completó una encuesta.

Los 1.323 participantes en el ensayo se limitaron a adultos con un índice de masa corporal superior o igual a 25 kg/m2, lo que se considera sobrepeso; por ejemplo, alguien que midiera al menos 1,65 m y pesara más de 75 kg.

Para poder participar en el estudio, los voluntarios se inscribieron en los tres días siguientes a la recepción de un resultado positivo de la prueba de COVID-19. Fue uno de los primeros ensayos clínicos aleatorios de COVID-19 que incluyó a mujeres embarazadas.

El estudio incluyó a las que estaban vacunadas y a las que no lo estaban. Se trata del primer ensayo publicado en el que la mayoría de los participantes estaban vacunados.