MADRID, 26 May. (INFOSALUS) -
El estrés es un mecanismo humano para activarnos frente a un peligro pero las amenazas cotidianas ya no son librarnos del ataque del tigre de dientes de sable y parecen haber desbordado los límites de lo natural para dar paso o agravar las enfermedades humanas.
¿ES NEGATIVO EL ESTRÉS?
Según explica a Infosalus Ramón P. Villaamil, empresario y consultor en el sector del bienestar y autor de 'Estar bien para vivir mejor. Guía para la serenidad y la vitalidad', el estrés en sí mismo no es negativo, la vida sin retos no tiene sentido pero tienen que ser retos accesibles que no generen una ansiedad desagradable.
EL ESTRÉS ES UN CAMBIO FÍSICO QUE HAY QUE LIBERAR
"El estrés es físico y como tal es un cambio físico que hay que liberar, todo depende de si sabes hacerlo", señala Villaamil que añade que existen ya muchos estudios que apuntan que el estrés pasado se despierta como una reacción activada por un recuerdo oculto y capaz de evocar sensaciones.
EFECTO ACUMULATIVO DEL ESTRÉS EN EL CUERPO HUMANO
El estrés tendría en este sentido un efecto acumulativo en el ser humano. "Los animales liberan el estrés derivado de vivir en un ambiente lleno de peligros con movimientos espasmódicos que les permite ser capaces de liberar esa energía", apunta el autor.
Así, Villaamil recuerda que tenemos un claro ejemplo de ello en nuestros animales de compañía. El perro al salir a la calle descarga toda la tensión de haberse puesto nervioso ante la salida inminente con sacudidas. "Los humanos deberían pensar menos y moverse más, sacudirse el estrés con movimiento", afirma Villaamil.
En su texto, el autor describe que las ideas más recientes y documentadas sobre la liberación del estrés mediante los temblores imitando a los animales provienen de los estudios del doctor Peter Levin, creador de una escuela y una metodología que está mostrando gran eficacia en el tratamiento de casos de estrés postraumático.
Según asegura el autor, en cualquier caso el sector del bienestar y las técnicas para encontrarlo deberían estar siempre dentro del ámbito de la prevención y los hábitos de vida mientras que si se presenta la enfermedad la opción razonable es acudir al médico y que éste indique si podemos poner en práctica sin peligro alguna de las distintas técnicas o disciplinas alternativas.
EQUILIBRIO FÍSICO, MENTAL Y ESPIRITUAL CONTRA EL ESTRÉS
"En la sociedad actual nos planteamos más amenazas, más ambiciones, bombardeados por la publicidad recibimos muchos más 'inputs' y enfrentamos más teóricas amenazas que en otras muchas culturas", señala Villaamil que expone en su libro una selección de técnicas, disciplinas y reflexiones para alcanzar el equilibrio entre la vitalidad física y la serenidad mental y espiritual.
BIENESTAR FÍSICO, MENTAL Y ESPIRITUAL
Para Villaamil el bienestar se sustenta en una banqueta de tres patas, si alguna de ellas falla, la banqueta se cae. Estos tres pilares del bienestar serían el bienestar físico (orientado a comer, dormir, cuidar del cuerpo); el bienestar mental (controlar el estrés, plantear retos moderados alcanzables, buscar un equilibrio, reducir las fuentes de estrés); y el bienestar espiritual (que responde a las cuestiones sobre el sentido de la vida).
El autor ahonda en los múltiples beneficios de las principales tendencias del bienestar para equilibrar estas tres patas de nuestra banqueta, desde la técnica Alexander o el método Grinberg hasta los cinco ritos tibetanos o el mindfulness.
