La ciudadanía colaborará enviando fotos para alertar de la procesionaria, sequía y vendavales
BARCELONA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (Creaf) y el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (Icta) elaborarán un proyecto pionero para demostrar científicamente vínculos entre la salud de los bosques y la salud de las personas, ha explicado el profesor e investigador del Icta, Martí Boada, en rueda de prensa.
La iniciativa conjunta 'Bosques sanos para una sociedad saludable', impulsada por la Obra Social La Caixa, se sustentará en una línea experimental, elaborada en bosques del Montseny y en laboratorios, y en una línea de participación ciudadana, ha explicado el director corporativo de Investigación y Estrategia de la Fundación Bancaria La Caixa, Àngel Font.
El proyecto parte de la idea que los bosques influyen en el bienestar psicológico de las personas y se propone aportar evidencias para demostrarlo empíricamente, además de investigar como el estado de salud de las masas forestales puede tener efectos en la salud humana.
EL MONTSENY, LABORATORIO NATURAL
Investigadores de Icta analizarán en el bosque del Montseny los principios activos que emiten las plantas, como varían según el entorno forestal y medirán como se incorporan y metabolizan estas sustancias dentro del cuerpo humano después de haber estado en un bosque.
El interés por estos temas ha derivado en una oferta de actividades dirigidas en espacios naturales, como los baños de bosque, que este proyecto intentará demostrar experimentalmente por primera vez.
Boada ha explicado que la variedad de los bosques mediterráneos de encinas, alcornoques, pinos y hayas de las zonas del Parque Natural del Montseny permitirán exportar los resultados a otras regiones.
PARTICIPACIÓN CIUDADANA
Por su parte, el Creaf pondrá a disposición de la ciudadanía la plataforma Alerta Forestal para crear una red de vigilantes de bosques que les permitirá aumentar su campo de estudio, enfocado en el estado de salud que tienen los bosques actualmente y cómo cambiarán en el futuro, ha explicado el investigador del centro Jordi Vayreda.
Los usuarios podrán alterar a través de la web o aplicación móvil sobre zonas forestales afectadas por sequía, vientos y nieve, y a partir de este martes se pondrá en marcha el proyecto para alertar sobre la procesionaria.
Hasta el momento, parte de esta información ya está siendo recogida por los agentes forestales, pero con este proyecto se pretende alargar en el tiempo el estudio a partir de las imágenes que mandarán los ciudadanos.
EL FUTURO DE LOS BOSQUES
Vayreda ha hablado sobre la importancia de tener información sobre cómo cambia la salud de los bosques en función del clima local, la pendiente, la orientación o la estructura, que obtendrán a partir de las imágenes que los ciudadanos capten con sus drones.
Con toda esta información se elaborarán modelos matemáticos para predecir cuáles serán los espacios más saludables en un futuro cercano, teniendo en cuenta que las condiciones ambientales y climáticas están cambiando en todo el planeta.
En 2018 Icta trasladará el estudio sobre el terreno al sector médico con el objetivo de estudiar las interacciones entre el microbioma forestal y el microbioma humano, que se analizará a partir de análisis de sangre y orina elaborados a personas que hayan pasado un tiempo en el bosque.