MADRID 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de investigadores del Instituto de Investigación Infantil de Seattle (EEUU) y la compañía Sanaria han desarrollado una nueva vacuna para prevenir la malaria y que ya está disponible para ser probada en seres humanos, así lo han comunicado en un informe publicado el 21 de marzo de 2024 en la revista 'EMBO Molecular Medicine'.
Se trata de una cepa de vacuna contra el parásito de la malaria completa que infecta el hígado, se desarrolla hasta la fase hepática tardía y, a continuación, se atasca por completo y no puede salir del hígado para causar una infección sanguínea sintomática.
La creación de esta cepa denominada Fase Hepática Tardía Detención, Replicación Competente (LARC2, por sus siglas en inglés) se logró mediante la deleción de sólo dos genes del parásito de los aproximadamente 5.000 que contiene el genoma del parásito 'Plasmodium falciparum'. Esta cepa de parásito incapacitado será el único inmunógeno de la vacuna de tercera generación de Sanaria, 'Sanaria PfSPZ LARC2 Vaccine'.
El estudio fue dirigido por el doctor Debashree Goswami y el doctor Hardik Patel, que trabajaron en el laboratorio del doctor Stefan Kappe del Instituto de Investigación Infantil de Seattle y un equipo de Sanaria dirigido por el doctor Kim Lee Sim.
EL PROCESO DE LA MALARIA
Los mosquitos inoculan unos parásitos del paludismo llamados esporozoitos (SPZ), que infectan rápidamente las células hepáticas dentro de las cuales cada parásito individual puede multiplicarse hasta producir hasta 50.000 parásitos en 6-7 días.
Esta primera fase de la infección pasa totalmente desapercibida y no provoca ningún síntoma. Cuando los parásitos salen del hígado, infectan decenas de miles de glóbulos rojos, causando la mortal enfermedad de la malaria. El equipo de Kappe, en colaboración con el doctor Ashley Vaughan del Instituto de Investigación Infantil de Seattle, construyó la cepa LARC2 suprimiendo dos genes críticos sin los cuales los parásitos se multiplican en el hígado casi hasta la madurez pero luego se desintegran, lo que impide que nuevos parásitos lleguen al torrente sanguíneo.
De este modo, los parásitos LARC2 estimulan una respuesta inmunitaria muy fuerte en el hígado, que protege contra futuras infecciones de paludismo. Al evaluar 'PfSPZ-LARC2' aséptico, purificado y crioconservado producido en Sanaria en ratones humanizados con células hepáticas y glóbulos rojos humanos, el equipo del estudio pudo demostrar que las fases hepáticas maduras y tardías del ciclo vital del parásito de la malaria estaban completamente comprometidas.
"Estas cepas debilitadas del parásito pueden entrar pero no salir", afirma Kappe, que también es profesor del Departamento de Pediatría de la Universidad de Washington (EEUU).
ESPERAN SALVAR MILLONES DE VIDAS
"La vacuna 'PfSPZ-LARC2' de Sanaria tiene el potencial de salvar millones de vidas y eliminar la malaria de zonas geográficas definidas cuando se administra en programas de vacunación masiva. Tenemos previsto evaluar la vacuna 'PfSPZ-LARC2' en ensayos clínicos en 2024 en EEUU, Alemania y Burkina Faso. Las generaciones anteriores de vacunas contra PfSPZ no cumplen los requisitos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de ofrecer una protección del 90 por ciento contra la infección o pueden provocar infecciones en el torrente sanguíneo. Por lo tanto, estamos impacientes por llevar esta nueva cepa de vacuna genéticamente modificada a los estudios clínicos", ha explicado el fundador y consejero delegado de Sanaria, Stephen L. Hoffman.
Para proteger contra la malaria y eliminarla, la OMS ha reconocido la necesidad de vacunas que prevengan la infección en el estadio sanguíneo humano en individuos que tengan una eficacia vacunal >90% durante al menos 12 meses contra la infección por la malaria 'Plasmodium falciparum' de transmisión natural, que es responsable de >98% de las 625.000 muertes por malaria.
Sólo las vacunas contra esporozoitos de 'P. falciparum' de Sanaria han logrado una eficacia vacunal >90% frente a infecciones controladas de paludismo humano y han demostrado una protección sostenida sin refuerzo frente a la transmisión natural en África. Se prevé que los parásitos 'PfSPZ-LARC2' induzcan fuertes respuestas inmunitarias celulares en el hígado que serán altamente protectoras contra la infección. En su publicación, el equipo del estudio demostró que la vacunación con LARC2 protege completamente contra la infección en modelos de ratón de malaria.
"Hemos tardado casi 20 años en llegar a la vacuna 'PfSPZ-LARC2'. Encontrar los genes adecuados que, cuando se eliminan del genoma del parásito, lo detienen justo cuando quiere salir del hígado, fue una tarea ingente. Nuestros resultados proporcionan una clara indicación de que es posible la atenuación segura y completa del desarrollo de los parásitos de la malaria y estamos entusiasmados por ver el resultado de los primeros ensayos clínicos con esta vacuna", ha manifestado Kappe.
"Estamos entusiasmados con el potencial de la vacuna 'PfSPZ-LARC2' para prevenir el paludismo en viajeros a regiones endémicas, y en mujeres embarazadas y niños en zonas con paludismo, y eventualmente para eliminar el paludismo de regiones enteras", ha finalizado el profesor Peter Kremsner, director del Instituto de Medicina Tropical de la Universidad de Tubinga en Alemania, y Presidente del Centro de Investigaciones Médicas de Lambaréné (CERMEL) en Gabón.