MADRID 28 May. (EUROPA PRESS) -
La técnica de incidencia política de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) Paula Echevarría ha hecho hincapié en la necesidad de que los profesionales sanitarios trabajen con perspectiva de género porque "incluso cuestiones sociolaborales pueden impactar en el acceso a tratamientos, medicamentos, o tiempos de espera para que las mujeres sean tratadas".
Así se ha pronunciado durante la I Edición del Foro de Salud Y Género, que han organizado el Observatorio de Salud (OdS) y Estudio de Comunicación como continuación del primer Libro Blanco sobre Salud y Género de España, presentado el pasado mes de febrero en el Congreso de los Diputados.
Este Foro, que ha contado con el apoyo de GSK y Sobi, tiene el propósito de abrir debate sobre la importancia del género en la manera en la que se entiende la salud; y visibilizar cómo los sesgos sociales tienen un impacto decisivo en el sistema sanitario.
"Cuando planeamos el Libro Blanco de Salud y Género, nos dimos cuenta de que había una falta de igualdad y perspectiva de género en el abordaje de diversas patologías. Existen complicaciones y tratamientos cuyos efectos son diferentes en hombres y mujeres. Es por eso por lo que necesitamos conocer las problemáticas concretas que sufren las mujeres en la atención médica y hospitalaria", ha comentado Ángel Gil, coordinador del Libro Blanco de Salud y Género.
Todos los ponentes han estado de acuerdo en que el feminismo "visibiliza" el sesgo que tienen las políticas de salud. Según Carla Delgado, portavoz de la Comisión de Igualdad de Sumar en el Senado, estas están "centradas en el patrón masculino". "Es necesario aplicar la perspectiva de género en materia de salud, y necesitamos enfoques y acciones concretas; algo que sin duda es una de las tareas del feminismo del Siglo XX", ha dicho.
De hecho, para poder llevar a cabo acciones y estrategias concretas, se ha puesto de relieve la importancia de la educación y la pedagogía en materia de género en el sector salud.
El portavoz de la Comisión de Sanidad del PSOE en el Senado, Kilian Sánchez, ha comentado que "hablar de sanidad en todos sus aspectos normaliza y visibiliza". "Esto es algo que ha hecho el Libro Blanco de Salud y Género, que evidencia que el 40 por ciento de las mujeres frente al 30 por ciento de hombres ya padecen o tienen predisposición a adquirir una patología crónica", ha dicho. "Tenemos que abordar estas patologías desde un ámbito feminista y desde las instituciones públicas y el ámbito educativo", ha agregado.
Los ponentes también han compartido sus impresiones sobre las barreras existentes en el ámbito sanitario. En este sentido, la secretaria primera de la Mesa de la Comisión de Sanidad y Médico de familia y salud comunitaria, Carmen Martínez, ha comentado que "hacen falta políticas de igualdad que incidan en sanidad, y que garanticen el acceso a la salud de las mujeres".
"España es uno de los países de la Unión Europea que ha incluido la trasversalidad de género en sus planes sanitarios, y esta perspectiva tiene que ser inherente a la acción política y pública". Sobre esto, Echeverría además ha añadido que "uno de los principales problemas detectados es el retraso del diagnóstico de las mujeres, que es hasta 3 años superior al de los hombres". "A la mujer que le falta un diagnóstico, le falta también un tratamiento que necesita", ha señalado.