¿Podría la terapia asistida con psicodélicos cambiar el tratamiento de la adicción?
MADRID 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
Tras años de ser consideradas peligrosas 'drogas de fiesta', las sustancias psicodélicas están recibiendo una renovada atención como terapias contra la adicción, pero se necesita mucha más investigación, según una nueva serie especial de artículos de la revista 'Journal of Studies on Alcohol and Drugs', publicada en la Universidad de Rutgers (Nueva Jersey, Estados Unidos).
Los psicodélicos son sustancias que esencialmente alteran las percepciones y pensamientos de los consumidores sobre su entorno y sobre sí mismos. Durante milenios, las culturas indígenas han utilizado plantas con propiedades psicodélicas en la medicina tradicional y los rituales espirituales. Y durante un tiempo, a mediados del siglo XX, los investigadores occidentales se interesaron por el potencial de los psicodélicos para ayudar a tratar una serie de afecciones psiquiátricas, incluidos los trastornos por consumo de sustancias.
Esa investigación se detuvo poco después de comenzar, en parte debido al uso recreativo de drogas como el LSD (ácido) y la psilocibina (setas mágicas), así como a la llamada guerra contra las drogas del gobierno federal estadounidense.
Las cosas han cambiado en los últimos años. Drogas como la psilocibina, la ketamina y el MDMA (éxtasis) se están estudiando de nuevo, en lo que los investigadores denominan terapia psicodélica asistida: En pocas palabras, se administran pequeñas dosis de estas drogas bajo supervisión médica, en combinación con la terapia de conversación convencional.
Como destaca la serie JSAD, una serie de pequeños ensayos clínicos han probado la terapia asistida con psicodélicos para ayudar a personas con dependencia del alcohol, adicción a los opiáceos y otros trastornos relacionados con el consumo de sustancias. Los resultados han sido prometedores y sugieren que el enfoque puede conducir a mayores tasas de abstinencia que la terapia convencional por sí sola.
Lo que realmente llama la atención es lo rápido que puede funcionar la terapia asistida con psicodélicos frente al enfoque estándar ya que se han observado beneficios duraderos tras sólo una o tres sesiones de tratamiento.
"Realmente le da la vuelta al tratamiento convencional de los trastornos por consumo de sustancias", afirma la doctora Dominique Morisano, del Centro de Adicciones y Salud Mental de la Universidad de Toronto.
A primera vista, podría parecer contradictorio tratar la adicción con una droga psicodélica, según Morisano, coautora de un editorial publicado con la serie. Pero, según ella, las personas con trastornos por consumo de sustancias suelen consumir drogas para "esconderse" de sus pensamientos y sentimientos problemáticos.
La terapia asistida con psicodélicos, por el contrario, parece ayudar a "levantar el velo" y permitir que las personas tengan percepciones -momentos de luz- que contribuyen a su recuperación, explica Morisano. Los pacientes pueden, por ejemplo, tener sentimientos renovados de autoeficacia que facilitan la adopción de comportamientos más saludables y habilidades de afrontamiento. Nadie sabe exactamente cómo lo consiguen los psicodélicos. Una teoría, según Morisano, es que actúan a través de la "neuroplasticidad", es decir, la capacidad del cerebro para reorganizar su cableado.
Por ahora, subraya Morisano, la gente debe entender que los psicodélicos no son un tratamiento de "hágalo usted mismo" para el abuso de sustancias o los trastornos mentales ya que el componente psicoterapéutico es crucial.
"Mucha gente ha sido engañada al pensar que puede 'microdosificarse' por sí misma, pero no se puede eliminar la psicoterapia de esto", señala Morisano