Es posible lograr embarazos seguros y exitosos después del trasplante alogénico de células madre

Archivo - Mujer embarazada toma el sol.
Archivo - Mujer embarazada toma el sol. - HOSPITAL VITHAS - Archivo
Publicado: lunes, 22 julio 2024 7:29

MADRID 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

A pesar de los desafíos de fertilidad relacionados con el tratamiento, las pacientes pueden quedar embarazadas y dar a luz a niños sanos después de someterse a un trasplante alogénico de células hematopoyéticas (aloHCT), según un estudio publicado en 'Blood' por investigadores de Hospital Universitario Carl Gustav Carus de Dresde (Alemania).

Durante el trasplante alogénico de células madre, se trasplantan células madre de un donante sano a personas con cánceres hematológicos o trastornos hematológicos benignos, como leucemia y anemia falciforme. Las mejoras en los procedimientos de administración del trasplante alogénico de células madre han permitido que haya más sobrevivientes a largo plazo, especialmente adultos jóvenes que esperan tener hijos. Sin embargo, la morbilidad relacionada con el trasplante, el uso de medicamentos a largo plazo y la recepción previa de radioterapia corporal total o quimioterapias de dosis alta plantean riesgos significativos para la fertilidad.

"La fertilidad es un tema muy importante para las pacientes jóvenes", recuerda la doctora Katja Sockel, médica senior del Hospital Universitario Carl Gustav Carus de Dresde (Alemania) y autora principal del estudio. "Algunas pacientes incluso optan por no recibir ciertos tratamientos debido a preocupaciones sobre la fertilidad. En el caso de las sobrevivientes de cáncer adultas jóvenes en particular, la vuelta a la vida normal incluye la planificación familiar".

En el estudio sistemático más grande hasta la fecha de mujeres adultas receptoras de trasplante de células madre, la doctora Sockel y su equipo analizaron retrospectivamente datos del Registro Alemán de Trasplante de Células Madre para estimar las tasas de embarazo y natalidad y determinar los factores de riesgo para pacientes femeninas de 18 a 40 años. De los 2.654 participantes totales del estudio, 50 mujeres informaron 74 embarazos, 57 de los cuales resultaron en nacimientos vivos, con un tiempo medio desde el trasplante hasta el primer embarazo de 4,7 años.

La probabilidad de embarazo se correlacionó positivamente con las mujeres de entre 18 y 35 años en el momento del trasplante alogénico de células madre, con una edad media de embarazo de 29,6 años. A pesar de que la tasa anual de primer nacimiento para este grupo de pacientes es más de seis veces inferior a la de la población alemana general, estos resultados del estudio refutan el consenso ampliamente aceptado de que el embarazo no es posible después del trasplante alogénico de células madre. Y aunque algunos de los embarazos registrados en el estudio fueron el resultado de la tecnología de reproducción asistida (TRA), el 72% de los participantes informaron embarazos espontáneos.

"Algunas participantes del estudio informaron que no habían tomado medidas para prevenir el embarazo porque su médico les había dicho que la concepción no era posible", afirma la doctora Sockel. "No se deben subestimar los embarazos espontáneos y se debe informar a las pacientes sobre la posible recuperación de la fertilidad después del trasplante alogénico de células madre para prevenir embarazos no planificados o no deseados".

Algunos factores se asociaron con una mayor probabilidad de un primer nacimiento vivo, entre ellos, un régimen de acondicionamiento de intensidad reducida, trasplantes por afecciones no malignas y ninguna irradiación corporal total o dosis más bajas. Se produjeron complicaciones maternas en 25 de los 52 embarazos, las más comunes de las cuales fueron vasculares (ocurrieron en 16 embarazos), incluida la preeclampsia, el edema y la hipertensión. Aunque no superaron el riesgo de complicaciones de la población general, se recomienda un seguimiento interdisciplinario estrecho por parte de médicos de trasplantes y ginecólogos para evitar complicaciones maternas.

Se recogieron los resultados fetales de 44 embarazos y, en general, fueron positivos, sin mayores tasas de enfermedades infantiles o retrasos en el desarrollo en comparación con la población general. Sin embargo, hubo mayores incidencias de parto prematuro (nacimiento antes de las 37 semanas de embarazo) y bajo peso al nacer (1500-2500 g) en este grupo. Diez embarazos resultaron en parto prematuro, y la mayoría se produjo entre las semanas 28 y 32 de gestación. Además, seis recién nacidos tuvieron bajo peso al nacer, mientras que uno tuvo un peso al nacer muy bajo (menos de 1500 g). En general, la tasa de nacidos vivos para este grupo fue del 78 %, comparable a la de la población general.

"Los resultados de este estudio demuestran que las mujeres que reciben un trasplante alogénico de células madre pueden lograr embarazos exitosos y seguros", expone Sockel. "Estos hallazgos ayudan a proporcionar una base para asesorar a mujeres jóvenes en edad fértil y aumentar la concienciación y la financiación de las diferentes técnicas de reproducción asistida para que las pacientes puedan tener una vida normal después del trasplante alogénico de células madre".

El estudio tuvo algunas limitaciones debido a su naturaleza retrospectiva. No se pudieron obtener medidas de fertilidad, como la función ovárica antes del trasplante alogénico de células madre o los niveles de hormona antimülleriana, y surgieron dificultades para recopilar datos completos de las entrevistas a las participantes de manera retrospectiva. Además, el estudio se basó en embarazos y resultados del embarazo informados por las propias participantes, lo que puede haber llevado a que no se informaran todos los embarazos fallidos. Por último, algunos tipos de técnicas de reproducción asistida no estuvieron disponibles para las pacientes durante el estudio que duró una década.

Los autores esperan que los estudios prospectivos permitan comprender mejor cómo los tratamientos previos al trasplante alogénico de células madre, incluidas las terapias nuevas y dirigidas, afectan la fertilidad en pacientes jóvenes con cáncer. Este conocimiento ayudará a avanzar hacia una terapia más individualizada que equilibre la eficacia antitumoral con la minimización de la toxicidad y la preservación de la fertilidad.