MADRID 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) ha lanzado un test sencillo de tres preguntas para detectar si se realiza un consumo de riesgo de cualquier bebida alcohólica, incluido en un folleto informativo desarrollado en coordinación con el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Dicha iniciativa, impulsada bajo el lema 'Alcohol, ¿Cuánto es mucho?', busca informar sobre qué es un consumo de riesgo y saber qué prácticas que cada uno lleva a cabo se pueden catalogar como tal, así como para concienciar a la población sobre cuánto alcohol se bebe y aportar recomendaciones para disminuir su consumo.
Sobre todo, según recuerda esta sociedad científica, porque el consumo de riesgo de alcohol aumenta las probabilidades de tener en un futuro problemas de salud graves como cáncer, hipertensión arterial o enfermedades hepáticas, entre otros.
El test pregunta por la frecuencia de consumo de alcohol, el número de consumiciones diarias y cuántas veces se sobrepasan las 6 consumiciones en una única ocasión, para en función de las respuestas determinar si el consumo es de riesgo o no.
El coordinador del Grupo de Educación Sanitaria y Promoción de la Salud de PAPPS de la semFYC, Rodrigo Córdoba, ha recordado que las fiestas de Navidad y las reuniones con amigos, compañeros de trabajo o familiares propias de estas fechas son "una de las citas anuales en las que más alcohol se consume".
"En términos de educación sanitaria y de promoción de los hábitos saludables, pensamos que es importante que se tome conciencia de cuánto alcohol debe considerarse consumo de riesgo", según este experto.
LÍMITES DE CONSUMO DIARIO
En este sentido, la SEMFYC recuerda que actualmente se recomienda que en un día los hombres no superen las 6 unidades de bebida estándar (UBE)l, que equivaldría a 1 caña de cerveza, 3 copas de vino y 1 combinado; mientras que en las mujeres no sobrepasen las 4 UBE, que equivale a 1 copas de vino, 1 caña y 1 combinado.
Del mismo modo que indica los parámetros de los que se consideraría un consumo de riesgo, el documento también recuerda que las personas que conducen o realizan trabajos de precisión, las mujeres embarazadas o que están en proceso de lactancia, los menores de edad y las personas que están tomando medicamentos deben consumir alcohol.
En este sentido, expresó recientemente la necesidad de que el Gobierno adopte legalmente las cinco recomendaciones presentadas en la reunión de Ministros de Sanidad europeos y respaldadas por la Comisión Europea y el Plan Nacional de Drogas, que pasan por prohibir el consumo en la vía pública, limitar la publicidad, controlar los puntos de acceso, acotar los horarios de venta y subir impuestos sobre las bebidas alcohólicas.