MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
La mayoría de los ciudadanos europeos, especialmente los mayores y los niños, desconoce el significado de los pictogramas de peligro de los productos químicos que se suelen tener en casa como, por ejemplo, detergentes, amociacos, pinturas o aeorosoles, tal y como han alertado diversos expertos con motivo de la presentación del proyecto 'Nuevos pictogramas de peligro. ¡Tenlos presentes!'.
De hecho, esta iniciativa, presentada en la sede de la Comisión Europea de Madrid y puesta en marcha por la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), con la financiación de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), tiene como objetivo informar y formar a la sociedad sobre los peligros de los nuevos pictogramas, los cuales han pasado de ser cuadrado con fondo naranja a un diamente rojo con fondo blanco y símbolo en negro.
Y es que, tal y como ha recordado el presidente de CECU, Fernando Móner, durante el año 2014 se recibieron en el Servicio de Información Toxicológica unas 100.000 llamadas, de las cuales 75.000 estaban relacionadas con la exposición a algún producto químico potencialmente tóxico, probablemente por no saber el significado de los pictogramas.
De las nueve etiquetas de advertencia existenes, cuatro están relacionadas con los peligros que puede suponer para la salud un mal uso, otras cuatro con el físico y una para el medio ambiente.
En cuanto a las primeras (una calavera con tibias cruzadas, un torso con una estrella, una corrosión y un signo de exclamación) se pueden encontrar en insectividas, desatascadores, barnices, pegamentos, pinturas, detergentes, limpiacristales y amoniaco, entre otras. Un mal uso de estos productos puede provocar náuseas, vómitos, dolores de caveza, pérdidas de conocimiento, alergias, asmas, dificultades respiratorias, quemaduras y lesiones oculares graves, irritaciones cutáneas y oculares, somnolencia, vértigo, cáncer e, incluso, la muerte.
Por su parte, los pictogramas de peligro físico (una llama, una llama sobre un círculo, una bomba explotando y una bombona de gas) se suelen encontrar en los quitaesmaltes, pegamentos, lejías, ambientadores, desinfectantes de manos o aerosoles. Si el usuario no lo entiende puede correr el riesgo de que explote, se inflame o provoque quemadruas graves en la piel.
EN CASO DE INTOXICACIÓN, LLAMAR AL SERVICIO DE INFORMACIÓN TOXICOLÓGICA
Finalmente, el pictograma en el que aparece un pez junto a un árbol, y que se suele encontrar en plagucidas, disolventes, barnices, limpiadores, diluyentes de pinturas o aguarrás, avisa de que el producto puede provocar efectos nocivos en peces, crustáceos, algas y otras plantas acuáticas, tanto a corto como a medio plazo.
"La normativa obliga a que todo producto disponible el mercado sea seguro, si bien debemos ayudar a los consumidores a entender bien cada uno de los pictogramas que aparecen porque se ha demostrado la mayoría desconocen su significado", ha apostillado la directora ejecutiva de la AECOSAN, Teresa Robledo.
Por todo ello, se ha creado un calendario en el que cada mes se dedica a un pictograma, un imán informativo para colocan en la nevera, un vídeo y un apartado especial en la web de CECU donde se alojará información, materiales de proyecto, así como los datos jurícios y técnicos más relevantes.
En todos ellos, al igual que en las etiquetas de los productos, viene incluido el teléfono del Servicio de Infomación Toxicológica, ya que, tal y como ha asegurado Móner, es el único al que se debe llamar en el caso en el que se produzca un evento peligroso con algún producto tóxico.
