Analizará su posible relación con el estilo de vida, la alimentación y la higiene
BARCELONA, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Regulación Genómica (CRG) y la Obra Social La Caixa pondrán en marcha en septiembre un estudio pionero sobre el microbioma bucal y su posible relación con el estilo de vida, a través de la toma de muestras de saliva de 6.000 estudiantes de tercero de ESO de 40 escuelas de España.
El proyecto de colaboración ciudadana 'Saca la lengua', del que se empezarán a tener conclusiones en un año, pretende descubrir la variedad de microorganismos que viven en la boca, concretamente bacterias y hongos, y determinar si esa variedad está relacionada con alguna característica ambiental o con el estilo de vida.
Se trata de un viaje de 7.000 kilómetros por diez ciudades españolas, en el que un científico irá tomando muestras en todas las escuelas: "Llevaremos al proyecto bacterias y hongos de toda España, los juntaremos y veremos qué sale de todas ellas", ha explicado el director del Área de Gestión Territorial y Acción Educativa de la Obra Social La Caixa, Xavier Bertolín.
"El estudio es muy importante, primero, para conseguir divulgar, y segundo, para estimular que la gente joven se interese por la ciencia y que algunos jóvenes sean científicos en el futuro y contribuyan a cambiar el modelo económico de este país, basado en el ladrillo", ha destacado el director del CRG, Luis Serrano.
"El microbioma es una parte importante de nuestra salud y enfermedad; somos un ecosistema con diferentes nichos, puesto que el microbioma que tenemos en los diferentes órganos es distinto", según el director científico del proyecto, Toni Gabaldón, contento de dejar el laboratorio para pasar a un proyecto de ciencia ciudadana.
Los científicos del CRG han escogido el estudio del microbioma de la boca porque es "punto de entrada del sistema digestivo y vía de entrada de muchos microorganismos", y, aparte, estudios recientes han visto cada vez más correlación entre las alteraciones del microbioma con enfermedades importantes.
El análisis, con una partida de 150.000 euros, cuenta con una vertiente diagnóstica y de comprobación de hipótesis sobre hábitos de higiene y de vida que se intuyen pero que no están comprobadas científicamente --como que el chicle es foco de hongos y bacterias--, a la vez que esperan hallar correlaciones inesperadas.
También abre las puertas a un uso terapéutico, en un momento en que el microbioma se está utilizando para reemplazar las bacterias del sistema digestivo: en un futuro, se podría hablar de chicles que liberen bacterias potencialmente combativas para la caries, ha dicho Serrano a modo de ejemplo.
Uno de los objetivos del trabajo es ver las diferencias del microbioma de los jóvenes que viven en un hábitat urbano respecto a los de un entorno rural, y también se compararán los resultados en escuelas de barrios desfavorecidos con otros que no lo son.
HONGOS Y BACTERIAS A LA VEZ
"Se han estudiado las bacterias pero no los hongos, que suelen aprovechar alguna circunstancia para atacarnos, y vamos a convertirnos en uno de los pocos estudios que van a ver estos dos componentes a la vez", ha dicho el director científico del análisis.
El trabajo tiene un gran interés científico y, por tanto, estos resultados van a aportar mucho a la ciencia y van a ser parte de publicaciones científicas en un futuro con toda seguridad, asegura.
Por su naturaleza de proyecto de ciencia ciudadana, los científicos del CRG no van a estar solos y van a ir pidiendo ayuda a diferentes partes de la ciudadanía, a la que facilitarán los resultados para que se pueda hacer más preguntas y ayudar a encontrar resultados.