SEAIC se pone como objetivo de alcanzar "cero ataques" y normalizar la vida de los pacientes con angioedema hereditario
MADRID 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los últimos avances sobre nuevas mutaciones genéticas asociadas al angioedema hereditario han permitido profundizar en la comprensión de los mecanismos que provocan esta enfermedad, de manera que la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) ha presentado su objetivo de alcanzar "cero ataques" y normalizar la vida de los pacientes, durante el XXXV Simposio Internacional de la sociedad.
En la última década, se han identificado ocho nuevas mutaciones genéticas asociadas al angioedema hereditario, incluidas dos en el último año. "Estos avances no solo han ampliado nuestro conocimiento sobre la fisiopatología de la enfermedad, sino que también han dado paso a tratamientos innovadores que son más efectivos y seguros. Nuestro objetivo es lograr el 'cero ataques', permitiendo a los pacientes llevar una vida plena y activa", explica la vicepresidenta del Comité de Angioedema de la SEAIC, la doctora Alicia Prieto.
Entre estas nuevas opciones de tratamiento se encuentran alternativas de administración subcutánea y oral, que han demostrado una notable eficacia en la prevención de ataques, reduciendo la frecuencia de episodios en un 85 por ciento en muchos pacientes. "Estos enfoques han relegado a los andrógenos a una segunda línea de tratamiento, debido a sus efectos adversos y a su eficacia insuficiente en casos más graves", añade la especialista.
En la actualidad, la investigación continúa avanzando, explorando terapias génicas y nuevas vías de administración que podrían abrir la puerta a una curación definitiva del angioedema hereditario. "Estamos trabajando en la implementación de herramientas de seguimiento validadas en la práctica clínica, lo que nos permitirá medir el impacto de la enfermedad en la calidad de vida de nuestros pacientes y ajustar los tratamientos de manera personalizada", concluye la doctora Prieto.
Por otro lado, no sólo existen progresos en esta patología, sino que la inmunoterapia con veneno de himenópteros ha experimentado un desarrollo significativo en el ámbito de la mastocitosis y la alergia al veneno de estos insectos.
Según el presidente del Comité de Alergia al Veneno de Himenópteros de la SEAIC, el doctor David González de Olano, "la identificación temprana de pacientes con mastocitosis ha mejorado notablemente gracias a herramientas diagnósticas más precisas".
Además, la continuidad en la inmunoterapia es crucial, ya que los pacientes con mastocitosis necesitan un tratamiento indefinido para mantener la protección contra reacciones alérgicas. En este contexto, la repicadura controlada se ha consolidado como la mejor prueba para evaluar la efectividad de la inmunoterapia, con evidencia reciente que demuestra su seguridad y su impacto positivo en la calidad de vida de los pacientes.